La jugadora mallorquina de la selección española Alba Torrens atiende las explicaciones del técnico Miguel Méndez durante un entrenamiento en el Eurobasket. | FEB

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La selección española peleará este sábado (17:45) por un sitio en la que sería su sexta final en un Eurobasket y lo hará ante Hungría, una selección que hace apenas unos días le derrotó en el último amistoso del equipo de Miguel Méndez antes de este torneo. España, con la mallorquina Alba Torrens como una de sus grandes referencias, llega a esta cita reforzada por su sólida victoria del pasado jueves ante Alemania en los cuartos de final del torneo. Su notable defensa agarrotó a un equipo que pagó su inexperiencia en este tipo de cruces y le permitió un cómodo triunfo que, además, le aseguró una plaza en el preolímpico, lo que le supone haber conseguido ya su primer objetivo para este verano.

Tras haber brillado en la primera fase jugadoras como Laura Gil, Raquel Carrera, María Conde o Queralt Casas, el triunfo en cuartos fue mucho más coral algo que genera menos dependencia de cara a esta semifinal. Nada más acabar el encuentro ante Alemania, Méndez recordó que cada encuentro ante Hungría, tanto los dos que disputaron en la fase de clasificación para este Eurobasket este invierno como los dos amistosos que disputaron este mismo verano como preparación, han sido «una guerra» y que todos han sido encuentros «duros».

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El juego interior es el principal motor del equipo húngaro aunque la solvencia de Laura Gil y de Raquel Carrera, bien cubiertas fundamentalmente por Paula Ginzo, ha permitido ya a España hacer frente a pívots potentes durante el torneo.

Para este encuentro, Méndez mantiene la duda de María Conde, a la que se le salió el hombro izquierdo en el último encuentro de la primera fase ante Grecia y a la que no se quiso forzar frente a Alemania. Tampoco jugó en este último choque la capitana Silvia Domínguez, pero en su caso por decisión técnica y llegará descansada a la semifinal.