El Atlètic echa cuentas

El Atlètic Balears saborea su ascenso sin perder de vista la necesidad de trazar la hoja de ruta que marcará su nueva etapa en la Segunda División B. Los responsables de la blanquiazul abogan por disfrutar el momento y a partir de la semana que viene ponerse manos a la obra para confeccionar un proyecto en el que la prioridad es definir el aspecto económico.
La maquinaria en las entrañas del Estadi Balear no se detiene y Crespí confirmó su intención de poder contar con Pep Sansó en el organigrama técnico de la entidad, tal como adelantó Ultima Hora. El presidente valoró la trayectoria del entrenador mallorquín y su concocimiento del fútbol base y adelantó su interés por incorporarlo al club.
Todos los jugadores y el cuerpo técnico de la temporada 2009-10 finalizan contrato y entrenarán a lo largo de la semana para cerrar el ejercicio, por lo que a partir de la semana que viene será un empezar de cero para el presidente de la entidad, Fernando Crespí. El mandatario se resiste a adelantar acontecimientos y pretende conceder todo el protagonismo a los jugadores.
A finales de esta semana podría mantener una reunión con Tolo Cursach en la que valorarán el grado de implicación que podría tener el empresario mallorquín en una nueva etapa en la división de bronce después de la vinculación reciente que han mantenido y la amistad que mantiene con Crespí.
El ascenso en la primera eliminatoria concede un notable margen de maniobra y el Atlètic Balears apunta alto. El presidente aspira a hacerse con los servicios de jugadores mallorquines que juegan en la Península y otros de la Isla. Nombres como los del delantero balear del Recre, Chando, o del ex mallorquinista Julián Robles son algunos de los que agradan en la Vía de Cintura, donde también se valora muy positivamente la posibilidad de hacerse con los servicios del solleric Tomeu Reynés, que abandonará el Sporting Mahonés tras una buena campaña.