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El automovilismo balear gana crédito. No sólo por la regeneración del equipo gestor de la Federació d’Automobilisme de les Illes Balears, sino por la proposición de una serie de medidas que pretenden relanzar el peso de la territorial que ahora preside Rafael Abraham y mejorar su capacidad de gestión.

Una de las prioridades es la consolidación de la licencia autonómica, propuesta que se planteó y presentó de manera oficial el pasado viernes, en una reunión informativa, y que se espera se pueda aprobar en la Asamblea General del 23 de febrero.

Abraham explicó que la licencia autonómica está amparada por la legislación nacional y autonómica (Llei de l’Esport), además de estar contemplada en los estatutos de la FAIB. Así, se fijo una licencia que establecerá tres tipos, precios y coberturas diferentes: básica, superior y avanzada. La básica tendría coberturas superiores a la expedida por la Española, con un 40% menos de coste, mientras que la avanzada quintuplica las coberturas mínimas y es más económica que la validada por la RFEDA.

La básica autonómica costaría 265 euros, la superior 305 y la avanzada 320, mientras que la nacional vale 350, mientras que en el caso de las escuderías, la Española cobra 600 euros, por los 250 de la autonómica.
De la misma manera, la Federació d’Automobilisme expedirá licencias de participación por pruebas, por 60 euros, frente a los 135 de la Española.

El desarrollo de las licencias autonómicas permitirá que los recursos económicos que generen sean gestionados directamente por la FAIB, lo que ayudará a invertir en la mejora de la territorial, siendo los principales beneficiarios de todo ello los deportistas, organizadores, escuderías y oficiales adscritos a la Balear.