El guardameta serbio Dmitrovic reduce a su agresor en el terreno de juego. | PIROSCHKA VAN DE WOUW

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El Sevilla avanzó ronda en la Europa League pese a perder 2-0 ante el PSV Eindhoven, haciendo valer la renta del partido de ida, un 3-0 que valió otro para el equipo de Sampaoli, en un partido que dejó una triste imagen. Y es que un aficionado del equipo neerlandés saltó al césped y agredió al portero del equipo andaluz, Dmitrovic, que recibió un golpe por la espalda y pudo reducir al seguidor hasta que fue retirado del terreno de juego por la seguridad del estadio.

El guardameta serbio Marko Dmitrovic sustituyó en el once inicial del Sevilla a su compañero Yassine Bono, por una indisposición sufrida momentos antes el encuentro que les enfrentó al PSV Eindhoven. El Sevilla cayó por 2-0 en el estadio del PSV Eindhoven, con un gol del exsevillista Luuk de Jong en el 77 y otro del luso Fabio Silva en el alargue, pero logró el pase a los octavos de final de la Liga Europa, un torneo que ha ganado seis veces, la primera precisamente en esta ciudad neerlandesa, al hacer valer el 3-0 que llevaba de la ida.

Tras un primer tiempo con mucha lucha y pocas ocasiones, con el equipo español defendiendo bien su renta, en el segundo el PSV de Ruud van Nistelrooy buscó el milagro y, aunque pudieron marcar Youssef En-Nesyri y el croata Ivan Rakitic, que remató al larguero en el 67, fue De Jong el que adelantó a un conjunto neerlandés al que se le anuló otro gol en el 81, por fuera de juego de Silva, que logró el definitivo 2-0 en el minuto 95.