Imagen de Manuel Olivares, el primer internacional isleño y el máximo goleador mallorquín en Primera. | Ultima Hora

TW
0

El paso del tiempo ha sepultado a lo largo de la historia todo tipo de personajes que merecerían protagonizar novelas, películas, documentales o un reportaje como este. Hoy sacamos del olvido a Manuel Olivares Lapeña. Nacido circunstancialmente en Son Servera el 2 de abril de 1909, son pocas las personas de la Isla, inclusas aquellas que profesan un sincero amor por el fútbol, que están al tanto de la actualidad o les interesa aquello que hoy se llama futbol vintage, que saben que El Negro –así era conocido– fue el primer futbolista en proclamarse máximo goleador (el actual Trofeo Pichichi) de la historia del Real Madrid en la temporada 32-33, hace ahora nueve décadas.

Criado en el País Vasco, a donde se trasladó con su familia con apenas dos años por motivos laborales de su padre, es también el máximo goleador mallorquín en Primera División con 54 goles en 82 partidos divididos entre el Club Deportivo Alavés, Donostia Fútbol Club (actual Real Sociedad), Zaragoza, Club Deportivo Málaga, Hércules y el conjunto blanco.

El segundo es Víctor Casadesús con 49 tantos (37 como bermellón y 12 con la camiseta del Levante) y el tercero Marco Asensio con 41 (4 con el Espanyol y 37 con el Real Madrid). Olivares es también el único mallorquín que se ha coronado como máximo anotador de la Primera División española.

A diferencia de estos dos últimos, Olivares, que jugaba de delantero, nunca vistió la camiseta del Real Mallorca. De hecho, cuando Olivares se retiró, el equipo isleño todavía no había asomado la cabeza por el fútbol de élite. Otro de los récords con los que cuenta en su haber es el de haber sido el jugador que ha necesitado menos jornadas para hacerse con el título de máximo goleador de Primera División en los 96 años de vida de la competición: apenas 14 partidos.

Es también el segundo ‘peor’ máximo goleador de la historia de La Liga al anotar 16 goles, dos más que Paco Bienzobas que ostenta este curioso récord desde la primera edición de este campeonato. Otro registro que convierte a Olivares en un futbolista histórico es que es el primer jugador que fue capaz de anotar un gol en Primera División y Segunda División. Lo hizo con la camiseta del Alavés, que defendió antes de militar durante tres temporadas en aquel Real Madrid previo a la Guerra Civil de los Ricardo Zamora, Quincoces, Ciriaco y compañía.

Después de retirarse en 1943 en Tercera División defendiendo los colores del Algeciras C.F., inició una carrera en los banquillos que le llevaría a dirigir a once equipos siempre en España, entre ellos algunos históricos como el Real Betis, Zaragoza, Málaga o Hércules F.C. Falleció en Madrid un 16 de febrero de 1976 a los 67 años.