Wang, de 29 años, número 49 en el ránking mundial, ofreció, sin embargo, tenaz resistencia en los primeros juegos. Sólo en el sexto pudo la española abrir brecha en el marcador (2-4) y, después de romperse el servicio mutuamente a continuación, Garbiñe cerró la manga en 35 minutos (6-3).
El segundo set ya fue otra historia. Con golpes potentes y muy combativa, Muguruza comenzó con una nueva rotura de servicio que consolidó en el segundo juego (2-0) y a partir de ahí el juego de la china se vino abajo hasta encajar un cero.
Tras el partido la española ha asegurado que, frente a la jugadora china con la que había perdido dos veces, ha salido «a morder» y celebró haber estado «en todo momento agresiva y acertada».
«La verdad es que estoy muy contenta con este partido. He jugado bien, en todo momento agresiva y acertada, y contra una jugadora ante la que ya había tenido dos derrotas. Esta vez he salido a morder», declaró la española tras el encuentro, en el que se impuso por 6-3 y 6-0.
Muguruza afronta con optimismo sus próximos compromisos. «Cada victoria te da ese plus de energía y de confianza. Quedan todavía muchos partidos, pero hoy es un día para estar contenta», dijo.
«Lo más importante -añadió- es dosificar la energía. En un evento tan grande, con tantas personas, tantas modalidades, hay que ver partido a partido. Es lo de siempre, pero en realidad es así».
En octavos de final, Garbiñe Muguruza se enfrentará a la vencedora del partido entre la checa Petra Kvitova -décima cabeza de serie- y la belga Alison Van Uytvanck.
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¿No es Mangarrufa?... XD