Imagen del proyecto del Circuit Illes Balears, que fue realizado años atrás por el arquitecto Gabriel Palmer. | R.D.

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Es una instalación soñada por los aficionados al motor, un proyecto que ha vivido varias intentonas frustradas, a excepción del hoy Circuit Mallorca de Llucmajor, y que un grupo de aficionados se ha propuesto sacar del cajón para darle forma. PtBiker, una asociación sin ánimo de lucro, lleva años trabajando en la reactivación de una iniciativa que pretenden dar a conocer a las instituciones, como elemento promocional de la Isla y fuente de ingresos, además de atraer a los aficionados al motociclismo o el automovilismo para que dispongan de un recinto en el que disfrutar de su deporte, evitando que se concentren en escenarios como la carretera de la Serra de Tramuntana (Ma-10) u otras vías conflictivas de Mallorca.

Por el momento, ya han mantenido reuniones con diferentes ayuntamientos de la Isla y fuerzas políticas, además de informar a federaciones implicadas, como la de automovilismo, de sus intenciones, de la misma forma que en su agenda está una entidad del calado de la FELIB (Federació d'Entitats Locals de Balears) e incluso instancias superiores como Consell de Mallorca o Govern balear.
En un primer momento, se pretende ofrecer a los municipios la posibilidad de acoger esta futurible instalación de motor, para cuyo desarrollo se cuenta con la base de anteriores proyectos, además de haber mantenido contactos con los gestores de otros recintos en diferentes regiones españolas.

Trabajo

Más de un lustro sentando las bases de esta iniciativa es lo que acumula PtBiker, contemplando unas necesidades de entre 500 mil y un millón de metros cuadrados para poder llevar a cabo la construcción del proyecto eternamente reclamado por el motor isleño, pero que ahora tiene como único escenario una instalación privada como la de Llucmajor.

Ofrecer a los deportistas y las federaciones deportivas un recinto seguro y de calidad, además de servir como foto de atracción para equipos extranjeros son algunas de las líneas maestras de los impulsores de esta iniciativa que, en caso de no encontrar apoyo público, contemplan asumir el reto en primera persona para poder saldar la asignatura pendiente del motor mallorquín: un circuito.

Durante el año 2010 empezó a coger forma la posibilidad de levantar el proyecto del Circuit Illes Balears. Pep Yuste, por entonces presidente de la Federació Balear de Motociclisme, y el arquitecto Gabriel Palmer, junto a Agustín Arbex, asumieron el mando, llevando a cabo contactos con varias instituciones, contando con el apoyo incondicional del Ajuntament de Llucmajor, municipio en el que se hubiera edificado la instalación.

Incluso visitaron la Isla Philippe Gurdjian, uno de los promotores más conocidos de la Fórmula Uno, y el patrón por entonces del Mundial, el británico Bernie Ecclestone, con el fin de conocer el alcance de la instalación y los detalles del proyecto, que formó parte del programa electoral de algunas formaciones políticas en los comicios insulares y autonómicos de 2011.