Melanie se despide con otro récord

Costa dio la cara en su posta (55.20), pero las opciones de estar entre las ocho mejores pasaban por bajar de los cuatro minutos, un objetivo lejano, pero tangible viendo el ritmo que imprimieron australianas y japonesas desde el inicio. Los cronos de la primera serie, en la que Holanda (3:59.19), China (3:59.38), Rusia (3:59.57) y Alemania (3:59.95) dejaron la puerta abierta, hacían albergar alguna ligera esperanza que se mantuvo hasta el final del concurso de Duane da Rocha. Marina García y Judith Ignacio sufrieron en exceso el ritmo frenético de la manga, con Australia llegando a nadar por debajo del récord mundial.

Brillante relevo

La barrera de los cuatro minutos ya parecía infranqueable, pese al brillante último relevo de Melanie, que permitió mejorar tiempos, aunque Suecia quedaba lejos, y mucho más Gran Bretaña, que marcó la última marca de final en una serie que presentará a cinco de los ocho aspirantes a las medallas.

Los 3:55.42 de Australia dejaron clara la velocidad de la tanda. Japón (3:57.87), Dinamarca (3:58.35), Estados Unidos (3:58.88) y las anfitrionas (3:59.37) lograron plaza, por delante de Suecia (4:00.76) y la España de Melanie Costa, que con sus 4:03.05 obtenía un nuevo récord nacional a añadir al historial de la deportista mallorquina, que se despide de sus segundos Juegos con dos plusmarcas nacionales y tres plazas de reserva para las finales de 200, 400 y el relevo 4x200 libre, una buena hoja de servicios para la natación española y balear en Londres.

Para las islas, la mejor desde los tiempos de los hermanos Escalas, que tomaron parte en Moscú 80 y Los Ángeles 84, alcanzando Rafael la final de los 1.500 libre en la capital rusa, un hito que Melanie ha tenido en su mano igualar y superar. Será en Río 2016.