El Bàsquet Inca ha empezado a sentar las bases de su nuevo
proyecto. El club quiere dar un salto cualitativo importante y
estudia una futura inversión cercana a los cien millones de
pesetas, desembolso que le permitiría confeccionar una plantilla
altamente competitiva y romper con un ciclo perdedor que ha tenido
un nítido influjo en el crecimiento social y deportivo de la
sociedad.
La ejecutiva inquense no quiere que se repita la situación que
se vivió en los albores del actual curso "se especuló con renunciar
a la franquicia LEB" y desde hace varias semanas ha realizado
gesiones que ya han dado sus frutos. Según ha podido saber esta
redacción, el club ha cerrado acuerdos para la próxima temporada
que le reportarán unos ingresos ligeramente superiores a los 65
millones de pesetas y ahora ha orientado casi todos sus esfuerzos
en lograr un patrocinador principal. La directiva mantiene
conversaciones con diversas empresas, entre ellas una constructora,
pero hasta el momento no se ha sellado ninguna vinculación. El
Bàsquet Inca considera que si en un plazo no superior a los dos
meses logra generar recursos económicos que alcancen los 85
millones de pesetas, podría dar consistencia a un proyecto muy
ambicioso.
El club mallorquín también ha iniciado una reestructuración en
los despachos acorde con las exigencias de una categoría
profesional como la LEB. Sunil Bhardwaj ocupa desde hace varios
días la gerencia y en el nuevo organigrama que maneja el presidente
Joan Rubert también aparecen nuevas figuras con dedicación
exclusiva.
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