TW
0

A las nueve y media de la noche del próximo 3 de julio, la Universiada producirá el primer gran estruendo que no tiene su origen en los despachos. Una espectacular señal sonora que los organizadores no quisieron precisar marcará el comienzo de la ceremonia inaugural de los Juegos Mundiales Universitarios, una manifestación multicultural de unas dos horas de duración con la que Balears se presentará al mundo. «Preferimos mantener en secreto el comienzo del acto pero puedo asegurar que toda Palma sabrá que en Son Moix estará a punto de ocurrir algo grande», señaló ayer José Luis Rupérez, director ejecutivo de GSB-Rumor, la empresa que ha diseñado el proyecto.

Dividida en varios actos y con la cultura mediterránea como hilo conductor, la ceremonia inaugural representará algunos de los principales pasajes de la historia balear. Bajo la dirección artística de Gerardo Vera, 500 voluntarios ejecutarán una coreografía en la que aparecerá, con un fondo musical de Chopin, el emblemático sol de Joan Miró. Tras un segundo acto denominado «Baleares, tradición y modernidad» "en el que tendrá lugar un multitudinario ball de bot" cuatro honderos en representación de cada una de las islas procederán al encendido del pebetero. En este punto, Rupérez destacó la colaboración de la Federación Balear de Tir de Fona, que está ayudando a los organizadores a convertir en realidad una idea tan original como complicada.