El Real Mallorca derrotó 1-0 al Real Zaragoza con un gol de
Biagini, de penalti, y desplaza al Celta de la segunda plaza,
consolidando sus aspiraciones de jugar la Liga de Campeones la
próxima temporada. El equipo balear marcó casi al finalizar la
primera parte y desde entonces se dedicó a cuidar la ventaja, sin
arriesgar lo más mínimo y confiando toda su suerte a la solidez de
su defensa.
El Zaragoza, al que se le vio muy metido en el partido, fue el
primero en apurar la suerte de los lanzamientos de larga distancia
ante Roa, aunque el meta argentino resolvió con eficacia y
seguridad cada una de las intentonas ofensivas visitantes. El
Mallorca jugó fiel a su estilo, con una defensa -donde volvió a
causar baja el argentino Gustavo Siviero, que se recupera de una
lesión- muy ordenada, un centro del campo dirigido por «Caño»
Ibagaza y las incursiones habituales por las bandas de Stankovic y
Lauren.
El 0-0 parecía el resultado lógico de los primeros 45 minutos,
pero un empujón de Paco a Lauren (min. 42) fue considerado penalti
por el colegiado madrileño García Aranda, ante las airadas
protestas de los jugadores visitantes y del técnico Txetxu Rojo.
Biagini transformó la falta máxima y puso en ventaja a su equipo,
que pudo afrontar la segunda parte con mucha más tranquilidad. El
Zaragoza empleó todos su argumentos ofensivos en la reanudación,
pero el Mallorca le esperó con el orden habitual en sus cobertura,
muy bien dirigida por Marcelino.
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