Carles Moyà sufre para superar en la primera ronda al austríaco Hipfl

Moyà necesitó dos horas y 55 minutos para doblegar a su primer enemigo en París, un jugador situado en el puesto 85 del mundo, con quien nunca se había enfrentado hasta ayer, que desplegó un agresivo juego de fondo y llevó a mal traer al campeón español. El mallorquín tuvo muchos problemas con su derecha, su mejor arma, y también con su servicio. En realidad no empezó a jugar bien hasta el tercer set, cuando logró colocarse con ventaja de 2-0.

Hipfl notó poco a poco el cansancio de sus largas correrías por la pista y fue bajando su intenso ritmo de las dos primeras mangas. En la cuarta, incluso, tuvo que ser atendido por unos problemas en la rodilla izquierda. Con esta victoria, Moyá elude convertirse en el primer campeón de Roland Garros de la historia que pierde en la primera ronda al año siguiente en su defensa del título. El español, que se supone habrá despertado con el partido de ayer, se enfrentará en la segunda con el ganador del encuentro entre su compatriota Alberto Martín y el checo Petr Korda.

En otros partidos de la jornada de ayer en la que juegan siete españoles, dos de ellos dijeron adiós. Alex Calatrava sucumbió ante el veterano estadounidense Jim Courier, ex número uno del mundo y vencedor en París en 1991-1992 y finalista en 1993, por 6-1, 6-3 y 7-5.