Ésta es la fachada de la Iglesia Adventista del Séptimo Día de Buenos Aires, donde los feligreses rinden culto a Dios diariamente. Foto: TOMÀS MONSERRAT.

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La posibilidad de que Carlos Roa medite abandonar el fútbol al término de la presente temporada tiene en vilo a toda la afición del Mallorca. Por este motivo Ultima Hora quiso conocer de primera mano los motivos por los cuales el mejor portero del mundo puede deja el deporte activo y mantuvo una entrevista con el que fue su pastor y ahora es el responsable de comunicación de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, Tercio Márquez. Desde la central de esta Iglesia en Buenos Aires, Márquez recordaba los primeros contactos que tuvo Roa con él. «Yo compartí con él nuestra acción pastoral, él venía a nuestra parroquia en Avellaneda y tenemos un conocimiento muy estrecho de Carlos». Márquez dijo conocer los motivos de la posible marcha de Roa a través de la prensa y habló sobre los motivos que pueden hacerle tomar tan importante decisión. «Yo nunca he escuchado declaraciones personales de él, tengo entendido que la razón que él aduce es de vivir una vida más tranquila y yo que lo conozco personalmente siempre lo he visto como un hombre que quiere dedicarse por completo a sus hijas y a su mujer, no es un hombre preocupado por la plata, nunca lo fue, ni tampoco por la fama. Quiere dedicarse a su familia y la religión adventista destaca que el sábado se guarda para el día de culto, de familia, de pasear, parece que piensa que no quiere trabajar más en sábado, es una actitud coherente que siempre pensó pero que nunca pudo cumplir. El cuarto mandamiento indica que el sábado se tiene que estar con la familia, descansar y ser fiel a Dios en este mandamiento, pienso que debe ser esa la razón». El pastor aseguró por otra parte que «la Iglesia Adventista no es incompatible con el fútbol. El fútbol se juega los domingos pero los compromisos de él son tan importantes que los clubes no le han permitido en el contrato librarse los sábados de concentrarse o entrenar. El no ha conseguido que los clubes le den esa libertad. Ahora él quiere, me imagino, tener la libertad del sábado y ir a la iglesia e ir con la familia y no ir concentrado. Para la Iglesia Adventista, ser jugador de fútbol no es absolutamente contrario a la fe o al cristianismo. El problema en el caso de él es el sábado, si tuviera la libertad del sábado tendría un elemento menos de tensión».