Después de haber logrado la pasada semana dos medallas en los
nacionales de ruta (oro en la contrarreloj y bronce en el fondo) la
salmantina Dori Ruano, invitada por su buena amiga Magdalena Rigo,
se desplazó a nuestra isla para pasar unos días de descanso y
competir en el velódromo de Campos enfundada en el maillot de
campeona mundial logrado el año pasado en Burdeos.
La primera y única ciclista femenina campeona mundial, por la
que el aficionado mallorquín siente un especial afecto, se debió
enfrentar al artanenc Miguel Alzamora el jueves noche en el
velódromo de Campos.
Dori, siempre identificada con la carretera, nos recordaba su
llegada al ciclismo en pista: «en el 96 participé en los
campeonatos de España disputados en Palma; gané la puntuación y la
persecución, lo que ya me hizó tomármelo más en serio. En el 97 me
clasifiqué para el mundial, donde logré la medalla de plata en
puntuación. El año pasado conseguí el oro, lo que ya me ha hecho
decantar de pleno por la pista».
El ciclismo femenino sigue sin relanzarse en España
«especialmente porque falta cantidad y los patrocinadores se
decantan por el ciclismo masculino. Las féminas para poder vivir
del ciclismo tenemos que decantarnos por la pista ó el mountain
bike».
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