Diego Tristán debutó con el primer equipo y no lo pudo hacer mejor, con un espléndido gol. FOTO: T.M.

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3 MALLORCA: Burgos, Olaizola, Nadal, Niño, Miquel Soler, Lauren, Engonga, Ibagaza, Stankovic, Carlos y Tristán.
Cambios: Armando por Ibagaza, Quinteros por Carlos y Francisco Soler por Tristán.
0 NUMANCIA: Núñez, Jaume, Rocha, Octavio, Muñiz, Pacheta, Nagore, Castaño, Caco Morán, Popescu y Rubén.
Cambios: Iñaki por Castaño y Morales por Popescu.
GOLES: 1-0, min.1: Stankovic, de penalti; 2-0, min.21: Carlos; 3-0, min.29: Tristán.
ÀRBITRO: Medina Cantalejo, del Colegio Andaluz. Amonestó a Nuñez y Rocha, del Numancia, y a Burgos, Nadal y Carlos, del Mallorca.

TOMEU TERRASA
El Real Mallorca firmó ayer la primera victoria de la temporada en un partido al que le sobró el segundo tiempo. Con tres a cero en el marcador a la conclusión del primer tiempo, los rojillos sentenciaron un encuentro no muy vistoso pero tremendamente efectivo.

El conjunto bermellón se adelantó muy pronto en el marcador. Apenas había transcurrido el primer minuto del partido cuando una internada de Carlos fue atajada en falta por el portero Núñez que derribó al punta de Mairena dentro del área. Stankovic tomó la responsabilidad de lanzar la pena máxima y no falló, colocando de esta forma el uno a cero en el luminoso de Son Moix.

Los de Goico apenas creaban peligro y no eran capaces de superar a la bien colocada defensa bermellona. Sin embargo en una contra visitante, Burgos tuvo que despejar a córner un disparo a bocajarro de Caco Morán que recibió una perfecta asistencia de Nagore. El internacional argentino estuvo bien colocado y logró despejar un disparo envenenado desde el punto de penalti.

Fruto de este dominio y de la rapidez de ambos puntas llegó el segundo gol local. Fue en el minuto 20 cuando Carlos ganó una vez más la espalda a la defensa , dribló al portero y marcó a placer el dos a cero. El de Mairena fue una vez más letal y demostró como su rapidez es clave en la delantera mallorquinista. Con el dos a cero en el marcador, Nadal tuvo que hacer penalti sobre Nagore, que se encargó de lanzar Rubén. Sin embargo bajo los tres palos estaba situado el internacional argentino, que volvió a ejercer de crack y, como hizo en el primer partido de Liga, volvió a atajar la pena máxima.

El efecto Vázquez funcionaba al cien por cien y fruto de este dominio llegó el tercer gol local. Stankovic lanzó una falta desde el vértice izquierdo y Tristán metió la punta de la bota batiendo al meta soriano. El tres a cero era una realidad y el encuentro estaba sobradamente sentenciado. El Mallorca a partir de estos momentos empezó a controlar sin problemas el balón y el Numancia lo intentaba con corazón pero con poca cabeza.