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Dos por uno. Félix Herraiz e Israel Pampín por un nuevo jugador interior. Bàsquet Inca tiene previsto rediseñar su plantilla profesional en los albores de la Copa Príncipe de Asturias, cuya presencia se ha convertido en un objetivo prioritario en la recta final de la primera vuelta. Olmos tiene claro que necesita un cinco contrastado para adquirir equilibrio y consistencia dentro de la pintura y la contratación de un nuevo pívot se antoja inminente.

Formalizado hace varias semanas el despido del valenciano Herraiz, la inminente salida de Israel Pampín jugará un papel determinante a la hora de fichar a este nuevo jugador. El escolta quiere abandonar el Bàsquet Inca "Plasencia de Liga EBA puede ser su próximo equipo" y firmar por un equipo que le garantice minutos, circunstancia que permitirá al club reinvertir las fichas de estos dos jugadores "Herraiz y Pampín" en el nuevo pívot. No obstante, la contratación no se consumará hasta que el Consell Insular defina su política de subvenciones. Bàsquet Inca no quiere asumir más riesgos económicos, aunque el próximo día 15 de diciembre "fecha en la que está previsto un nuevo encuentro entre la directiva inquense y los responsables del CIM" puede tener las cosas claras.

Olmos, desde que se consumó la marcha de Félix Herraiz, ha reivindicado la llegada de un nuevo jugador interior y en los próximos días puede ver atendida su petición, condicionada a estos dos factores: el caso Pampín y la renovación del convenio con el Consell.