El Constància de Inca cambia de diseño y de estructura. El club de
es Raiguer, desquiciado tras el enésimo fracaso en una fase de
ascenso, ha querido dar un paso al frente y remodelar su actual
estructura. El primer paso ha sido la contratación de Nico López
como director deportivo y la negociación con Cacho, un ex jugador
del FC Barcelona que ha dirigido a varios equipos de élite en
Sudamérica, para que se haga cargo de la plantilla 2000/01.
El acuerdo deportivo con el preparador sudamericano es factible,
pero el montante económico de la operación aleja a Cacho del
banquillo del Camp Nou. El técnico es una apuesta personal del
presidente Toni Martorell; el máximo mandatario de la entidad se
reunió el pasado lunes con el entrenador y ahora se encuentra a la
espera de amontonar el capital necesario para contratarle. Sin
embargo, el presidente reconocía ayer que «existe una importante
diferencia económica entra ambas partes. Vamos a intentar que se
resuelva este problema para que el Constància tenga un técnico de
reconocido prestigio internacional para la próxima temporada. Es un
entrenador que ha dirigido a muchos equipos de élite en Sudamérica
y que como futbolista militó en el Barcelona, por lo que es un lujo
su posible contratación».
Miquel Caldentey «Saletas» podría ser la alternativa al
entrenador sudamericano. La directiva del club inquense es
consciente de la dificultad del fichaje de Cacho y está sondeando
el mercado de técnicos en Mallorca. El perfil de preparador que se
ajusta a las pretensiones del club es el de Miquel Caldentey
«Saletas», un hombre joven de amplios conocimientos y que ha
dirigido al Cardassar la presente campaña logrando la mejor
clasificación de la historia de la entidad de Sant Llorenç.
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