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En fechas pasadas tuvo lugar en Mallorca un seminario de kajukenbo, una disciplina de reciente implantación en Mallorca en el amplio campo de las artes marciales. El seminario, al que asistió una veintena de participantes, fue impartido por Àngel García Soldado, introductor de esta modalidad en Europa.

Según explicó Àngel García, el kajukenbo es un estilo de kenbo, palabra que literalmente significa «hombre experto en el manejo de las manos», y que consiste en un sistema personal que amalgama técnicas procedentes de judo, kárate coreano, jiu-jitzu i otras artes marciales, y que se aplican principalmente para la defensa. En contraposición a lo que priva en muchas de las artes marciales, donde el objetivo es «ganar como sea», el kajukenbo se basa en principio de reducir al adversario y tranquilizarlo. Para Àngel García el objetivo no es formar competidores sino gente capaz de defenderse, de anular un ataque causando el menor daño posible al atacante. Para todos aquéllos que entran en un gimnasio a practicarlo, la disciplina y el rigor del aprendizaje están reñidos con los comportamientos violentos.

Según el mismo Àngel García, actualmente en nuestro país hay cerca de 600 participantes y existen diferentes asociaciones en expansión por todo el continente, que tienen establecido su centro en países como Francia, Bélgica o Suiza, entre otros.