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102 DRAC INCA: Cabral (21), Stacey (19), Villar (9), Aldama (11), Stuckey (19) "cinco inicial", Edu Sánchez (2), Mons (0), Montañana (13), Crespo (2) y Merino (6).
28 de 42 en tiros de 2 puntos. 9 de 15 en tiros de 3 puntos. 19 de 30 en tiros libres. 34 rebotes (26 en defensa y 8 en ataque). 22 faltas personales.

89 GRANADA: Liñán (10), Serrano (14), Talaverón (4), Hood (20), Jonhson (19) "cinco inicial", Coll (0), Romero (6), Jens Uwe Gordon (8) y Félix Sánchez (8).
25 de 44 en tiros de 2 puntos. 7 de 22 en tiros de 3 puntos. 18 de 23 en tiros libres. 23 rebotes (13 en defensa y 10 en ataque). 27 faltas personales.

ÀRBITROS: Alfonso Castillo y Palenzuela Pastrana. Excluyeron por cinco faltas personales a Santi Aldama (minuto 36). Técnica al técnico José Luis Abós (minuto 38).
INCIDENCIAS: En el descanso del partido, los olímpicos Marga Fullana (medalla bronce en bicicleta de montaña) y Albert Luque (plata en fútbol) recibieron un pequeño homenaje y agasajados con una placa conmemorativa.

ALBERT ORFILA
Un cambio de dibujo defensivo y la muñeca de Miguel Angel Cabral dejaron sin aire a uno de los mejores equipos que han desfilado por el Palau durante los últimos años y acabaron renovando el crédito del grupo de Abós. Granada hizo muchas cosas bien durante un buen puñado de minutos, pero perdió la brújula cuando Drac Inca se refugió en una zona y quedó arrinconado ante uno de esos factores difícilmente gobernables: el talento.

Justo cuando el cuadro andaluz había logrado empujar al Inca hacia el borde del precipicio (50-59, minuto 24), llegó la reacción. Apareció Luis Merino, y Willy Villar fue el primero en cargarse de responsabilidad y dar forma a un parcial de 9-0 que recolocó el partido. Granada mostraba por primera vez síntomas de espesura. Los tiros de Hood perdieron precisión y Drac Inca tomó medidas para evitar las segundas opciones, uno de los principales argumentos que sustentó el déficit que acumuló en el primer acto. Instalado el partido otra vez sobre un hilo, llegó el turno de Cabral. En algo menos de tres minutos y arropado por cuatro nacionales más (Stacey y Stuckey estaban en el banquillo), el alero jerezano respiró hondo y dinamitó el partido con dos acciones que valieron seis puntos (canasta y tiro adicional y un triple). Drac Inca se había escapado con un par de golpes de genialidad y Granada quedaba lastrado tras un tercer cuarto con números elocuentes: 29-15. En el último cuarto sólo hubo que administrar.