Los cuatro capitanes que forman el Grupo Técnico de la Federación
han respetado implícitamente el trabajo de cada uno de ellos en las
rondas anteriores contra Italia, Rusia y Estados Unidos. La
decisión conlleva que el mallorquín Carlos Moyá no podrá competir
en esta final histórica para España al considerar el G4 que el
doble Corretja-Balcells «es el mejor que se puede utilizar en este
momento y que ofrece mayores garantías».
La inclusión o no en el equipo de Moyá, quien había expresado su
ilusión y confianza en figurar en esta final, fue, según expresaron
los técnicos desde París al dar el equipo, el asunto que más
quebraderos de cabeza les había dado. «Es un palo para todos que no
esté», dijo Juan Bautista Avendaño.
La incorporación del campeón de Roland Garros en 1998
significaba apartar a Balcells y confiar en la pareja ganadora de
la medalla de bronce en Sydney, Corretja-Albert Costa. «Hemos
tenido muchas dudas y nos hemos decantado, no sé si por un pequeño
margen, pero creemos que es el mejor contra los australianos».
«Sé que es agarrarnos a una posibilidad pero ellos
(Corretja-Balcells) son los que más tienen», admitió Avendaño,
quien aseguró que para la otra opción hubieran necesitado más
tiempo y partidos.
No obstante, el grupo de técnicos confía que Carlos Moyá asuma
la decisión y decida incorporarse a los entrenamientos con el
resto, «porque es el mejor sparring que el equipo español puede
tener».
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