El Comité de Àrbitros no gana para disgustos. Pedro Adrover Mulet y
Felix Guerrero María han presentado un recurso ante el Comité
Balear de Disciplina Deportiva alegando que no fueron notificados
correctamente de su descenso. Domenech Riera amontona sobre la mesa
multitud de conflictos que apuntan a una mala gestión y que le
sitúan en el punto de mira.
En la reunión de la Federación Balear de Fútbol (FBF) de 13 de
julio se resolvió que Adrover Mulet y Guerrero María fueran
descendidos a Regional Preferente. Los dos árbitros conocieron la
noticia por la prensa y presentaron un recurso ante el Comité de
Apelación de la FBF, pero este organismo se declaró no competente y
los remitió al Comité Balear de Disciplina.
Los colegiados registraron la entrada de su recurso en
Disciplina el 24 de agosto basándose en el artículo 23 del Libro
XIII de los Estatutos de la Real Federación Española de Fútbol en
el que se establece que los árbitros deben ser informados en forma
y disponer de quince días para interponer un recurso. Al no haber
sido informados de acuerdo a la legalidad Adrover y Guerrero
solicitan la nulidad de su descenso.
Mientras tanto el Comité Balear de Àrbitros seleccionó a Adrover
Mulet y Guerrero María para dirigir partidos de Regional
Preferente, pero al no reconocer los colegiados sus descensos se
negaron a pitarlos y no dirigirán partidos hasta que el Comité
Balear de Disciplina Deportiva resuelva el recurso. La comunicación
oficial a los colegiados les llegó por carta certificada el pasado
30 de agosto, cuando ya se había disputado la primera jornada de
competición en Regional Preferente. Los árbitros luchan por la
nulidad de los descensos por un defecto de forma.
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