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Los miembros que forman la Asociación de Copropietarios del Real Mallorca se reunieron ayer noche en asamblea extraordinaria y si bien no acordaron ningún punto concreto, la conclusión que se extrae después de una hora de debate, es que la mayoría de miembros parecen no estar dispuestos a vender su título de propiedad al club balear y sí continuar negociando las contraprestaciones que le puede ofrecer la SAD mallorquinista a cambio de su documento. No obstante 57 títulos han sido vendidos al club, lo que significa aproximadamente un 8% del total que alcanza la cifra de 666. Los copropietarios, vendiendo su título, tienen un pase a perpetuidad en el campo donde juegue el Mallorca para ver todas las competiciones en las que participe el club mientras que de no aceptar esta propuesta el círculo se cierra y se pierde la opción de este privilegio.

Sin embargo los copropietarios insisten en su derecho de contar con el pase libre y de ahí que algunos de ellos hayan denunciado al club por incumplir lo que según ellos es un punto innegociable y que está redactado en el título de propiedad. Como se ha apuntado anteriormente no se llegó a la conclusión definitiva y los copropietarios quedaron emplazados para el mes de diciembre para tomar ya una decisión más o menos definitiva. Decisión que pasa, bien por agrupar a una cantidad de copropietarios y denunciar ante el juez el incumplimiento, en cierta manera de un contrato, o ceder a las pretensiones del club si este finalmente aumenta las contraprestaciones.

Miquel Contestí volvió a presidir la asamblea y pidió a los copropietarios que se agotara al máximo la vía del diálogo. En su opinión sería mucho más agradable el llegar a un acuerdo con la entidad sin necesidad de interponer un pleito contra la SAD, circunstancia que se presenta ciertamente complicada después de la asamblea celebrada ayer.