Aunque las condiciones meteorológicas de salida eran buenas en
Arras, el principal reto de esta primera etapa nocturna que no
cuenta con ningún sector especial y que se considera de «enlace»
fueron las bajas temperaturas, en especial para los pilotos de
motos. En el transcurso de la jornada de hoy, se disputará la
segunda etapa, de 598 kilómetros con final en Narbona y que contará
con un breve sector especial de seis kilómetros en el trazado de La
Souterraine, antes de llegar al control de paso ubicado en
Brive-la-Gaillarde. Los participantes en la carrera llegarán a
Dakar el próximo 13 de enero tras haber recorrido 9.436 kilómetros
a través de Francia, España, Marruecos, Mauritania y Senegal, entre
otros países.
Josep Maria Servià, la principal baza española en la competición
de coches, explicó que «como siempre», el «objetivo será la
victoria del equipo. La carrera se presenta muy interesante, ya que
nuestros rivales están más fuertes, pero, como siempre, nuestro
objetivo será la victoria del equipo», explica el catalán, que
pilotará un buggy Kangoo del equipo Schlesser. Para Servià, lo más
importante en este raid es «correr con la cabeza y cuidando la
mecánica», ya que la carrera es larga. «Está comprobado que no
sirve de nada ir muy deprisa si después debes detenerte para
solucionar imprevistos y problemas. Somos un equipo y haremos labor
de equipo, rodando juntos siempre que sea posible y apoyándonos,
puesto que nunca se sabe quién tropezará. Cada año lo hemos hecho y
siempre con buenos resultados», subrayó.
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