Fue Óscar Freire el que atravesó la línea de meta de Cala Millor,
pero el que provocó el histerismo colectivo fue Erik Zabel. La
amplia colonia germana que, bien de paso o de forma fija, reside en
el Llevant de Mallorca, tributó un sonoro homenaje al velocista
germano, cohibido ante el griterío de sus paisanos al subir al
podio como nuevo líder de la Challenge. Eso si, todo ello con el
permiso de un Toni Colom que ya domina la montaña en los albores de
la primera jornada con trazado relativamente empinado.
Llamó la atención la alta media registrada durante la etapa, en
la que se dejaron ver más ilustres ausentes en el Passeig Marítim.
Al margen de altas y bajas, Olano Virenque y Zulle siguen
mostrándose ariscos con prensa y aficionados. Por contra, uno de
los hombres más apreciados por la afición isleña sigue fiel a su
cita con la Challenge. Francisco Cabello (Kelme-Costa Blanca),
cuatro veces ganador de la montaña y dos de la general, vuelve a
centrar sus opciones «en las primeras carreras de la temporada,
para más tarde recuperar la forma en pleno verano. A Mallorca le
tengo mucho cariño, y es para mí siempre especial tomar parte en la
carrera», significó el granadino, al que se le empieza de ver.
Llega la etapa reina con tres puertos de
montaña
Hoy se disputará el tercera etapa de la Challenge Internacional
Vuelta a Mallorca con salida y llegada en Puerto de Alcúdia, de 172
kilómetros y tres puertos de montaña. El primero de tercera
categoría, el Coll de Honor, en el kilómetro 79 de carrera; el
segundo el Coll de Soller, kilómetro 92, de segunda y para remate
el Alto del Puig Major, kilómetro 118, de primera, desde la cima al
la llegada 60 kilómetros de vértigo. La salida esta fijada para las
11.50, mientras que el control de firmas se realizará desde las
10.50.
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