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La presentación oficial de David Beckham como nuevo jugador del Real Madrid sirvió para desvelar un secreto bien guardado: que el jugador inglés llevará el número 23 en su camiseta, el mismo que lució Michael Jordan, el último mito del deporte mundial. «Fichar por el Real Madrid es un sueño hecho realidad», aseguró Beckham tras recibir la camiseta del equipo blanco de manos de Alfredo Di Stéfano, presidente de honor del club madrileño. «David, bienvenido a la Liga de los sueños», le dijo Florentino Pérez, máximo mandatario del Real Madrid, que subrayó que «es posible que Beckham sea un icono del planeta que ejerza un hechizo global y sea un símbolo de nuestro tiempo, pero se le ha fichado porque es un gran futbolista, sencillo y profesional».

Victoria Adams, esposa de Beckham, también asistió al acto en el pabellón Raimundo Saporta, donde se congregaron más de quinientos periodistas acreditados, los miembros de la junta directiva del club y casi un centenar de invitados. A la conclusión, todos se trasladaron al campo 2 de la Ciudad Deportiva madridista para ver a David Beckham vestido de futbolista y ser fotografiado con su nueva indumentaria deportiva. Fuera, en la calle, alrededor de mil personas tuvieron el premio a su paciencia y les fue franqueada la entrada al recinto deportivo para ver al nuevo ídolo del equipo blanco, que se une a las estrellas Luis Figo, Zinedine Zidane, Ronaldo, Roberto Carlos y Raúl.

Beckham, siempre con la sonrisa en el rostro, cumplió con su papel a la perfección. Hizo malabarismos con el esférico, se dirigió aplaudiendo hacia los aficionados y les lanzó un par de balones. Estaba en su salsa. Se le nota que domina la situación y que las cámaras son sus mejores amigas. Su respuesta cuando un niño de 12 años, Alfonso, consiguió «burlar» las medidas de seguridad y acercarse a él para pedirle la camiseta, fue la de todo un profesional. El inglés, de 28 años, abrazó al niño y ante la petición de la camiseta, hizo un gesto para que le acercaran una y se la regaló. En una entrevista en exclusiva al canal de televisión del Real Madrid, «Becks» aseguró que no tuvo «ninguna duda» de qué equipo elegir cuando decidió que no continuaría en el Manchester United, «a pesar de que había otras ofertas».