Pacheco, junto a sus ayudantes e Ibagaza, en el entrenamiento de ayer. Foto: TOMÁS MONSERRAT

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El Real Mallorca 2003/2004 echó ayer a correr sobre el césped de Son Moix. Jaime Pacheco conoció a su «primer» equipo, ya que del grupo que ayer empezó a entrenar al conjunto que estará a su disposición el próximo 31 de agosto, habrá con seguridad mucha diferencia. De entrada no estaba Miquel Àngel Nadal al no haber renovado su contrato con el Mallorca. Tampoco se encontraba Óscar «Turu» Flores, jugador al que el club quiere darle de baja al no satisfacerle su rendimiento. En el capítulo de ausencias significar también que no se encontraba tampoco Jesús Perera, el punta proveniente del Albacete que está llamado a ser el delantero titular del Mallorca con vistas a esta misma temporada.

Pacheco, además de ver a los futbolistas de la primera plantilla, llamó también a varios hombres del filial. Toni González, Rafita, Enric Pi y un amigo de Etoo llamado Tierri y que está de prueba. Todos ellos completaron la nómina de jugadores que firmaron el primer entrenamiento del nuevo curso. Después de la primera fotografía de rigor, el equipo se puso a trabajar ya en serio con la disputa de un partido de entrenamiento donde destacaron hombres como Samuel Etoo, David Cortés o Albert Riera. También se vio a un Javier Olaizola muy motivado toda vez que ha superado su lesión y que empieza esta temporada con idénticas condiciones que el resto de sus compañeros. Empezó el curso para el Mallorca 03/04 y lo hizo, eso sí, con numerosas incógnitas. El futuro, para muchos futbolistas, es incierto y el verano será largo.

La principal sorpresa fue ver en el campo a Juan José «Tiburón» Serrizuela, el lateral argentino que llegó a Palma de la mano de Mario Gómez en 2000 y que el club remitió de nuevo al fútbol argentino por falta de adaptación.

También estuvo en la primera sesión de trabajo Cristian Díaz, otro lateral en este caso por la izquierda que viene a ocupar, en principio, la vacante que ha dejado Miquel Soler, al que no se le renovará el contrato, pero que aún no está desligado del club ya que no ha cobrado todo lo que se le adeuda. El técnico de Portugal reunió por espacio de veinte minutos a sus nuevos futbolistas, se presentó en el vestuario y después saltó junto a sus hombres al sol de Son Moix para ver el material del que dispone en estos momentos. La anécdota la protagonizó el interior de Manacor que llegó varios minutos tarde y fue recibido con una sonora salva de aplausos por parte del resto de sus compañeros.