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Xavi Viladot
Teniendo en cuenta que el Menorca Bàsquet juega en casa, que está bastante mejor colocado en la tabla que su adversario, que además acaba de ganar cuatro de sus últimos cinco partidos e incluso los precedentes entre estos dos equipos de las últimas temporadas, parece que el equipo de Curro Segura parte con la vitola de favorito en este primer gran derbi balear de la temporada. Pero el técnico granadino recela de tales consideraciones y alerta que «en un choque de estas características nunca hay un claro favorito. Además, el Inca también llega en un buen momento de juego y estos partidos siempre suelen ser muy igualados hasta los últimos minutos y decidirse en pequeños detalles por lo que mantener la concentración durante los cuarenta minutos puede resultar determinante».

Segura ya experimentó el año pasado lo que significa un choque de estas características y reconoce que es un partido que se vive con una intensidad especial entre los aficionados. «Es evidente que a nivel deportivo cuenta lo mismo ganar o perder ante el Inca que hacerlo contra cualquier otro equipo, pero anímicamente no es lo mismo ni para el equipo ni para la gente». Y para lograr esta victoria, Segura está convencido de poder contar, una vez más, con el apoyo incondicional del público que con toda seguridad llenará el escenario del partido y se convertirá en el sexto jugador del Coinga. «Su aliento es muy importante y seguro que, como siempre, estarán con nosotros», vaticina.

Sobre el equipo de Es Raiguer, el entrenador del cuadro menorquín señala que «dispone de una gran plantilla, compensada y con jugadores muy interesantes. Tienen hombres muy fuertes físicamente bajo los aros y también otros de calidad que hacen daño desde fuera, como es el caso de Javier Bulfoni». En este sentido, el objetivo de Segura en el aspecto defensivo es, precisamente, evitar que el Inca haga daño por fuera y por dentro simultáneamente. «Nos preocupa un poco todo y lo importante es lograr pararlos en alguna de esas dos facetas, porque si en las dos funcionan va a ser muy difícil hacerles frente». Y a esta buena labor defensiva, el técnico espera que se sume la facilidad anotadora que suele caracterizar a su equipo para tumbar al equipo mallorquín y consolidarse definitivamente entre los ocho primeros de la tabla. Toda la plantilla del Coinga está en perfectas condiciones físicas, excepto Àlex Burgos, que continúa con molestias en el dedo meñique de su mano derecha y que deberá jugar una vez más con la mano vendada.