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Xisco Cruz|VILLARREAL
En el rostro de Luis Aragonés se podía adivinar que la victoria en El Madrigal tenía un sabor especial para el técnico madrileño, quien no negó que durante los primeros cuarenta y cinco minutos, el conjunto castellonense marcó la pauta. «Jugamos muy directo, perdíamos la pelota y el Villarreal siempre nos ganó la posición, fueron sencillamente mejores», señaló Aragonés, para el que las cosas cambiaron radicalmente durante la segunda parte. «Entonces fuimos superiores. Hemos tenido tres o cuatro oportunidades claras, y ellos también gozaron de alguna, pero supimos esperar, saliendo con velocidad y logrando los goles, aunque creo que el que nos anularon era legar. Tocamos mejor que el contrario, al que le costaba llegar, y no se nos podía escapar la victoria. Por ocasiones y por todo en general hemos merecido ganar, no en vano, en el segundo tiempo hemos ido a mejor», añadió en sala de prensa un Luis Aragonés satisfecho por la labor de sus hombres sobre el terreno de juego.

La imagen del Real Mallorca ha variado de forma ostensible tras la aparición de Luis Aragonés en el vestuario mallorquinista. El panorama y los resultados invitan al optimismo y eso se lo sabe transmitir el preparador a sus hombres. «Perdimos en casa ante equipos muy importantes, pero no estuvimos al nivel actual. Por entonces teníamos más sombras que luces, aunque parece que hoy las sombras se han ido», finalizó un Aragonés plenamente satisfecho con las prestaciones exhibidas por el conjunto balear en un escenario hostil que gracias al Real Mallorca ya no es infranqueable.

La cuarta victoria consecutiva de los mallorquinistas supone dar un nuevo paso hacia las posiciones de privilegio, pese a que Aragonés se sigue mostrando tremendamente cauto. «En la Liga española cualquiera le puede ganar a cualquier. Pero a la larga los buenos están arriba y nosotros poco a poco vamos mejorando, estamos en el buen camino», dijo el técnico.