Agarrado al Palau y a la pujanza de su línea exterior, el Drac Inca
espera dejar hoy (12.00 horas) prácticamente zanjado el asunto de
la permanencia. La contundencia con la que se aplicó en el primer
partido de la serie (101-81) ha concedido al cuadro balear la
primera ventaja deplay out, aunque también ha desestabilizado
enormemente el factor anímico. El Ourense recibió un golpe que no
esperaba y todo ha empezado a jugar en su contra. No cabe duda que
el Inca ha establecido un principio de autoridad y no ha dudado en
imponer su jerarquía a las primeras de cambio. Es por eso que la
segunda entrega de la eliminatoria por eludir el descenso amanece
con las sensaciones antagónicas que desprenden sus dos
protagonistas.
Los números han reforzado el favoritismo del cuadro mallorquín,
que ha dejado a su adversario en una situación límite. Con el
factor pista en contra, el Ourense Baloncesto malgastó el viernes
una cantidad ingente de munición. Desde una perspectiva aritmética
sigue contando con opciones, pero un segundo fracaso le dejaría al
borde del abismo, con pie y medio en el negro pozo de la LEB-2.
Casi nadie ha levantado un 2-0.
Con todos los focos alumbrando y pendientes de Sergio Rodríguez
-en la primera cita anotó ocho triples, cinco de ellos de forma
consecutiva-, el Drac Inca acude a este segundo combate
notablemente rearmado. Jesse Young y Steven Johnson han disfrutado
de más horas para recuperarse, aunque es poco probable que haya
cambios en la línea exterior. La sociedad Bulfoni-Rodríguez arrojó
grandes dividendos en el estreno deplay out y su presencia en el
quinteto tendrá continuidad. Entre los dos sumaron 51 puntos, más
de la mitad (101) de los que logró su equipo. De hecho, la
estadística de Sergio Rodríguez resultó impresionante.
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