El Manacor aprovecha el tropiezo del Playas y asciende a División de Honor juvenil

El conjunto que dirige Martí Munar venía siendo el gran dominador de esta segunda fase de la competición y había reunido un importante colchón de puntos que le colocaba en una posición privilegiada. En la jornada de ayer, los feudatarios de Na Capellera se medían en casa al Portmany y después de un choque accidentado, no desaprovecharon la ocasión de sumar tres nuevos puntos a su casillero y seguir metiendo presión al Playas, que era el único de los aspirantes que todavía conservaba algunas opciones. Empezaron perdiendo, pero lograron equilibrar el marcador antes del descanso y resolvieron en los minutos finales para trasladar toda la presión al conjunto de Magaluf (3-1).

Sin embargo, el Manacor tuvo que esperar a conocer el resultado de Los Pinos para festejar el salto de categoría. Una vez sabido que los de Toni Campoy no habían podido pasar del empate, la euforia se desató en la ciudad de las perlas. El club rojiblanco obsequió ayer por la noche a plantilla y cuerpo técnico con una suculenta cena para celebrar la gesta y en las próximas semanas comenzará a planificarse el curso que viene. Martí Munar señalaba que «hemos llevado a cabo una temporada magnífica y nos esperábamos este éxito porque hemos estado trabajando muy duro durante todo el año. Este es nuestro premio».

El entrenador prefiere no marcarse de momento ningún plazo para acondicionar su plantel y prefiere disfrutar del momento, pero sabe que en la continuidad radican muchas de sus opciones de aspirar a conseguir la permanencia. «Esperamos que el 60% del equipo siga con nosotros, pero en cualquier caso, confiamos también en nuestro juvenil B, que aprovechando nuestro ascenso, ha podido subir también a Autonómica. Eso nos vendrá muy bien», concluyó.