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Los esfuerzos del Telenord s'Arenal se concentran en Toni Forteza. El reputado técnico, hasta el momento al frente del Alcúdia de Primera, es la principal alternativa que la entidad de la Platja de Palma baraja y es muy probable que hoy formalice su incorporación al banquillo hasta el final de la presente temporada. En la tarde de ayer, el presidente del Imprenta Bahía, Guillem Boscana, hizo saber su interés a Forteza, con quien mantuvo un encuentro en el que el ex entrenador del Grupotel.com le pidió unas horas para poder reflexionar y captar las opiniones de su entorno para dar una respuesta definitiva que todo apunta a que será del todo afirmativa.

«La Liga EBA me motiva tras mi anterior experiencia, pero tengo que analizarlo todo. Es una decisión complicada, pues en el Alcúdia me encuentro muy a gusto, y todos me animan a dar este paso», explicó el propio Forteza, quien esta misma tarde podría dirigir su primer entrenamiento al frente del Telenord, ocupando el hueco dejado por Pep Miquel Arbúcies, destituido el pasado lunes por la junta directiva dada la mala trayectoria de la plantilla.

El hecho de haber dirigido a algunos de los integrantes del equipo -Kiko Ramón, Pablo Esmorís, Toni Jiménez...- y la estrecha vinculación entre los dos clubes implicados en la operación abren las puertas del Toni Servera a un Toni Forteza que ayer pudo haber dirigido su último entrenamiento al frente del Alcúdia. «Me sabe mal por ellos, porque he encontrado un grupo de trabajo fantástico», dijo Forteza al respecto. En caso de cumplirse todas las expectativas, el primer paso sería un encuentro con los integrantes del cuerpo técnico, para conocer la situación desde todos sus ángulos. Guillem Boscana se mostraba optimista, aunque a la vez cauto. «Le he visto ilusionado, pero él tiene la última palabra», explicó el mandatario, quien a la par confirmó que si Forteza rechaza el ofrecimiento del Telenord, apostarán por un hombre de la casa. Forteza podría debutar el próximo domingo (12:30 horas) en la cancha del Mataró y dar el primer paso hacia la tan soñada tranquilidad.