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Efe|MONTECARLO
Tras dar el pésame a todo Mónaco por la muerte del príncipe Rainiero y asegurar que sus objetivos se están cumpliendo con creces, Rafael Nadal desveló sus planes de futuro. El tenista mallorquín aseguró que el siguiente paso sería obtener su primer grande, y ante la proximidad de Roland Garros, se decantó por el Grand Slam de hierba. «Si me dieran a elegir, elegiría Wimbledon porque es un torneo más especial. Sé que tengo pocas opciones en los dos, y que no obstante, si hay alguna de ganar uno, ese sería Roland Garros».

Nadal comentó que la experiencia de disputar dos finales seguidas de Masters Series le ha convencido realmente de sus posibilidades. «He estado a un gran nivel en ambas, y me han demostrado que puedo competir con esta gente tan buena y eso siempre ayuda para la confianza». De la final contra Coria, Nadal destacó especialmente la dureza y el trabajo mental que tuvo que realizar. «Ha sido una final especialmente complicada, porque desde el principio empecé con ruptura abajo en el primer juego, pero me he recuperado muy bien todo el encuentro», dijo.

«El único momento en el que se me ha complicado la cosa ha sido con el 6-0 del tercer set, pero ha sido circunstancial. Empecé mal esa manga y me he dejado ir porque no podía aguantar, no estaba preparado físicamente para todos los sets. Después, en el cuarto, cuando se me ha complicado la cosa, del 4-1 al 4-4, he estado muy bien mentalmente para poder aguantarlo», admitió. «Todo el partido he estado muy mentalizado para vencer y además he jugado un gran tenis y es lo que me ha hecho ganar. Estaba muy concienciado de que tenía que jugar muy bien para hacerlo, seguir un esquema de juego y así lo he hecho», añadió.