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Una docena de jugadores del Real Mallorca y un puñado de amigos se vistieron ayer de corto para tributar un cálido homenaje a Justo González, fotógrafo oficial del club balear en los últimos años y que falleció a comienzos del pasado mes de enero. En la veraniega tarde de la Ciudad Deportiva de Son Bibiloni se cruzaron periodistas con futbolistas y amigos con fotógrafos en un partido amistoso que fue presenciado por numeroso público. Una amplia representación de la primera plantilla mallorquinista acudió a la cita para homenajear al autor de sus mejores fotografías. Bajo la denominación de «amigos de Luis García» contra «amigos de Campano» se disputó un partidillo amistoso que reunió a un buen número de jugadores y que finalizó con victoria para el equipo de Luis García en la tanda de penaltis después de finalizar el partido en empate 8-8.

Mientras los jugadores del Real Mallorca siguen disfrutando de sus vacaciones, en el club ya cuentan las horas que restan para que Mateu Alemany deshoje la margarita y desvele su futuro. En principio, los accionistas de la SAD balear tienen previsto celebrar un consejo extraordinario de urgencia para despejar las incógnitas que presiden el destino el presidente del Mallorca. La idea es que la reunión se produzca mañana lunes o el martes como más tardar. Los consejeros no quieren demorar más una cuestión que está paralizando la sala de operaciones de la entidad en temas tan importantes como el futuro de Okubo, Arango o Melo. Además, de la decisión que tome Alemany podría depender también el destino de Héctor Raúl Cúper, que siempre ha ligado su proyecto a la continuidad del presidente bermellón. En las últimas horas ha crecido el optimismo entre los consejeros que se reunieron el pasado jueves con el presidente Alemany para que siga en el cargo. El futuro se decidirá en horas. Será entonces cuando arranque de verdad el noveno proyecto consecutivo en la nobleza.

Desde Tuni hasta Poli pasando por Okubo, Víctor, Alberto o Correa, eLechuga Roa y los goleadores de Tercera División Toni Cantos o Manolo Moyà, así como el preparador físico Antoni Servera, hicieron un alto en sus vacaciones para asistir al partido y acompañar a la familia de Justo González en una tarde inolvidable. La tarde arrancó a las siete con un minuto de silencio en memoria de Justo González y los discursos a cargo del capitán Alejandro Campano y de Luis García, asturiano como Justo, que quisieron encabezar un proyecto que contó con el respaldo de numeroso público, tanto compañeros de profesión como anónimos, que quisieron sumarse a un merecido homenaje. Asimismo, los integrantes de ambos equipos posaron ante una enorme fotografía de Justo y una pancarta que rezaba «Justo, te queremos y nunca te olvidaremos». Después, sobre el césped, llegaron las risas y los goles, el ímpetu de los amateur y las bromas de los profesionales en dos horas cargadas de emoción y melancolía, pero sobre todo de recuerdos. «Todos estamos esperando que Justo llegue con su cámara y capte la mejor foto», recordaban los asistentes al emotivo homenaje. Al final, después de provocar que el partido acabara en empate, decidió la suerte en la tanda de penaltis, donde el argentino Carlos Angel Roa demostró que todavía está para jugar.