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Pere Castelló / C.R.
Se acerca la hora de la verdad para dos de los equipos más representativos del fútbol isleño. Constància y Manacor vivirán el domingo el partido más importante de la temporada y llevan toda la semana preparando el encuentro con más intensidad que nunca. El ambiente en ambas ciudades crece a medida que se aproxima el momento del desenlace y se espera que tanto en el Nou Camp como en Na Capellera se registre el ambiente de las grandes ocasiones para intentar llevar a sus equipos a la próxima fase. En Inca todo está a punto para que el Constància intenté completar la remontada ante el Reus Deportivo. Los de Jaume Bauçà cayeron en la recta final del partido (1-0) y la plantilla está más motivada que nunca para minimizar al once catalán, al que ya superó en muchas fases del choque de ida. El técnico ha trabajado toda la semana sin bajas y sólo Luis Jiménez y Goyo presentan sendos golpes, aunque no parece que ninguno de ellos vaya a perderse el trascendental cara a cara ante el Reus. Para que todo esté a punto y las gradas vuelvan a poblarse, el club cobrará la entrada a un precio de 5 euros -los niños gratis- y tanto Bauçà como sus jugadores han reclamado el respaldo de la afición para poner contra las cuerdas a los catalanes.

En Manacor se está viviendo una fiebre muy parecida. La directiva de la entidad rojiblanca también se ha movilizado para que su masa social responda el domingo ante el Sant Andreu y también ha aplicado la política de precios populares -5 euros y menores de 18 años gratis- para hacer de su feudo su mejor aliado. Los rojiblancos ya se impusieron en la ida (1-2) y tratarán de rematar ahora un compromiso que tienen muy a su favor. Entre los colegios del municipio ya se está está publicitando el partido y los pasquines han empezado a inundar la ciudad pensando en la que será la mejor entrada del curso.

Sporting Mahonés y Peña Deportiva Santa Eulària están a obligados a extraer lo mejor de sí mismos para seguir vivos en la lucha por el ascenso. Los menorquines saldaron el duelo de ida ante el Hospitalet con empate a dos y tendrán que conquistar el feudo de los barceloneses si quieren acceder a la siguiente y definitiva ronda. Los pitiusos por su parte se desplazan a Mataró con idéntica misión, aunque el grado de dificultad es muy superior porque cayeron en Eivissa (0-1) y se han quedado sin apenas margen de maniobra. Unos y otros van a volcar todos sus esfuerzos para alargar la temporada durante las dos próximas semanas.