TW
0

EFE|LONDRES
El Primer Ministro británico Tony Blair plasma en Singapur el máximo apoyo institucional y gubernamental a la candidatura de Londres a los Juegos Olímpicos 2012, aunque el mayor reclamo de la ciudad será el jugador del Real Madrid David Beckham.

Estas serán las dos grandes apuestas de Londres en Singapur en el esfuerzo final por obtener la sede de los Juegos, en dura competencia con París, Madrid, Moscú y Nueva York.

Los principales obstáculos de la capital inglesa es la necesidad de construir la gran mayoría de las instalaciones en las que se deben celebrar las competiciones y también la falta de apoyo popular. Además, los escándalos suscitados por la BBC con la compra de votos del COI han motivado que crecieran sus problemas, a pesar de que se podría decir que la candidatura ha ido creciendo con el paso del tiempo hasta situarse por delante de Moscú y Nueva York para colocarse a la altura de Madrid con el informe de evaluación del COI.

El gran líder sudafricano Nelson Mandela, muy respetado y querido en el COI, es otra de las bazas de la candidatura londinense, tanto que figura en la portada de su página en internet.

«No hay otra ciudad como Londres. Es maravillosa, diversa y abierta, así como el hogar de cientos de nacionalidades diferentes. No puedo pensar en un mejor lugar que Londres para organizar un acontecimiento que una al mundo», señala el líder antisegregacionista.

La estrella del Real Madrid se siente honrado de que le hayan pedido ir a Singapur en lo que él califica como «un voto histórico».

«Yo soy del este de Londres, donde se ubicará el principal Parque Olímpico, y esto hace que me ilusione aún más con los planes de regeneración de la zona. Sería genial si los Juegos se organizan en Inglaterra, en donde a la gente le encanta el deporte», añadió Beckham.

El respaldo de la familia real ha sido también constante. La Reina Isabel no viajará a Singapur, pero fue una magnífica anfitriona de la Comisión de Evaluación del COI e, incluso, rompió la norma y salió al balcón de Buckingham Palace para despedir a los invitados después de la cena.