Los tres clubes baleares que participarán en la próxima edición de
la División de Honor juvenil, Mallorca, San Francisco y Rapid de
Eivissa, volverán esta año a su hábitat natural y formarán parte de
nuevo del grupo III de la categoría, en el que compartirán espacio
con rivales de Catalunya y la Comunitat Valenciana. Los isleños van
a ahorrarse una batería de incómodos desplazamientos, pero tendrán
que hacer frente a un grupo mucho más exigente en el que conviven
algunas de las canteras más poderosas del fútbol español. El
campeonato arrancará el próximo día 4 de septiembre y concluirá el
24 de abril, después de 30 apasionantes jornadas en las que los
baleares pelearán por objetivos muy diferentes.
El Mallorca, que es el representante local con más experiencia
en la categoría, abrirá una nueva etapa a domicilio, ya que su
nuevo técnico, Manolo Molina, debutará en el terreno de juego del
Cracks valenciano. El San Francisco en cambio, podría acusar el
cambio de escenario de la competición, ya que desde su último
ascenso se había movido siempre en las aguas del grupo central,
donde se aseguró la permanencia de forma cómoda. El cuadro colegial
afrontará su primera cita en Son Fuster, en un enfrentamiento ante
el Torre Levante Orriols.
El recién ascendido Rapid de Eivissa tendrá una bienvenida
espectacular en la categoría, ya que deben visitar La Masía en la
primera jornada y recibir posteriormente al Badalona. El primer
derbi tendrá lugar muy pronto, concretamente el 18 de septiembre
(3º jornada), fecha en la que Rapid recibirá en Can Misses al
Mallorca. Los pitiusos se medirán por primera vez al San Francisco
en la 11º jornada y el choque entre los equipos de Palma llegará en
la jornada siguiente.
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