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Que Rudy Fernández estuviera en la lista de Mario Pesquera era algo que pocos podían dudar después de la extrema confianza que en él depositó ni más ni menos que en los Juegos Olímpicos de Atenas. El escolta mallorquín del DKV Joventut está llamado a ser una de las sensaciones del Eurobásket que arranca hoy. Su segunda gran cita le debe consolidar en el equipo nacional en un evento que para Rudy «es una pasada. No es lo mismo que los Juegos, pero hay un gran ambiente. Se nota que estamos en un país que vive el baloncesto con pasión».

La baja de Gasol será clave para Rudy, quien sabe «de lo que impone en el juego interior. Pero también da carácter al equipo, aunque en los partidos de preparación, hemos demostrado que podemos pelearnos con los mejores. La competición va a ser muy diferente y pueden cambiar las cosas. A lo mejor podemos ganar a Grecia o pasar por encima de Serbia y Montenegro. Mañana -por hoy- empezaremos a ver qué nos espera», concluyó un Rudy Fernández que tuvo palabras de elogio para su hermana, Marta, bronce en el Eurobásket femenino de Turquía, y que en su momento le invitó a igualar o mejorar ese resultado. «Se lo merecieron, y tal vez se quedaron cortas, pero que sepan que nosotros no queremos quedarnos sin medalla».

Su aclimatación al ambiente de la selección absoluta es total. El pequeño de los Fernández ya es uno más y eso le permite llegar a Serbia y Montenegro con una mayor dosis de confianza, además de una forma física «que he cuidado para llegar bien a estas fechas y poder ofrecer un buen nivel ante lo que se acerca. En Atenas ya tuve tiempo de adaptarme a la dinámica del equipo. Los compañeros me han ayudado mucho, en especial Pau Gasol en los Juegos, pero también el entrenador. Pesquera siempre me ha tendido la mano y eso ha sido muy importante para mí», explica.

Ante los actuales campeones mundiales y anfitriones del Europeo, Rudy vivirá su puesta de largo en la máxima competición continental de clubes. Plantarle cara a Serbia y Montenegro y en su hábitat no intimida a un joven talento que con una veintena de años a sus espaldas ya sabe lo que es medirse a los mejores del planeta. «Va a haber mucha competencia. Tenemos un equipo para ganar medalla, pero con Pau Gasol podríamos aspirar a algo más. Sabemos que se nos va a exigir meternos en semifinales, pero con él tendríamos el oro más al alcance», afirma el futuro dos titular de la selección, quien resta importancia a la presencia en las gradas de numerosos ojeadores de la NBA y grandes clubes de Europa que seguirán de cerca sus pasos. «Bastante tengo con concentrarme en los partidos. Sé que estarán ahí, pero debo saber aislarme y dedicarme a lo que he venido, que es a ayudar al equipo a seguir entre los mejores», admite, a la par que no tiene claro quién puede ser el campeón. «Muchos hablan de Serbia y Montenegro, y tienen bastantes razones para hacerlo, pero no pueden dejarnos de lado ni a nosotros ni a otros como Lituania, Italia o Rusia. Es difícil, no me atrevo a hacer un pronóstico. Sólo pienso que vamos a estar en el podio, lo más arriba que podamos o nos dejen».

El Europeo dará las plazas que representarán al viejo continente en el Mundial de Japón, la que puede ser siguiente escala de Rudy en su meteórica carrera.