El entrenador del Mallorca se encerró anteayer con sus jugadores
para analizar errores, destripar los defectos mostrados el pasado
domingo ante el Málaga: «Sea cual sea el resultado, siempre hay
charlas después de los partidos. Se enfocan en las cosas que se han
hecho bien y mal. Lo más importante es que esas reuniones deben
tener un significado psicológico fuerte porque uno se tiene que
recuperar de cuatro goles, que no es fácil».
El principal problema apunta al aspecto defensivo, un hecho
cuando menos extraño tratándose de Cúper: «Estamos insistiendo en
cómo defiende el equipo, no sólo los cuatro de fondo, sino de cómo
tiene que defender todo el equipo. No jugamos tan mal
defensivamente, pero como el resultado es el que manda hay que
apretar en la intensidad con la que el equipo tendrá que empezar a
defender».
Cúper no cree que se haya encendido ya la luz de alarma: «Acá no
hay ninguna luz de alarma, hay una alarma y no hay que esperar a
que se encienda la luz. Si vamos a esperar que al barco le entre
agua por todos lados...debemos empezar a atacar ahora las
deficiencias y si se tiene el problema se trabaja en su solución.
Yo soy optimista».
De la hemorragia abierta en la portería, el argentino apuntó:
«Es parte del equipo y si el bloque no está muy seguro, no es
equilibrado, el portero también lo sufre. Hay que encontrar que la
estructura esté fuerte y así todo se va a ir solucionando». Cúper
prefiere estudiar el problema y tratar de hallar la solución: «Ya
hay que enjuiciar a este equipo porque si no hago una valoración
ahora, no puedo saber los problemas que tengo o resaltar las
virtudes. El equipo está ofensivamente bien, pero hemos retrocedido
en algo que a mí realmente me duele. Porque si me catalogan de un
técnico super defensivo y defensivamente el equipo no
responde...para mí esto es como una locura».
Las comparaciones con la pasada campaña no se han hecho esperar,
aunque Cúper difiere: «Esto no es lo mismo que el año pasado. En
ese sentido quiero dar una cierta tranquilidad porque no es lo
mismo. La pasada temporada teníamos problemas mucho más graves: nos
costaba mucho llegar a portería, crear ocasiones de gol... Es
cierto que estamos en la misma dinámica porque volvemos a tener una
media de dos goles encajados. Pero hay que tomar otras
comparaciones. Si cogemos todos los partidos del año pasado, me
parece que este año estamos jugando mejor fútbol que el año pasado.
Es mi opinión. Creo que si logramos ajustar algunos aspectos y eso
se mantiene, la cosa tiene solución», subrayó Cúper, más optimista
que nunca.
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