BRUESA GBC (22+28+21+30): José Luis Galilea (6), Ricardo Uriz (14), Devin Smith (17), J.R.Esmorís (8), David Doblas (23) -cinco inicial- Nacho Martín (23), Jon Santamaría (4), Esteban Martínez (2), Oler Almandoz (0) y Edu Ruiz (4).
27 de 35 en tiros de dos, 9 de 24 en lanzamientos triples y 20 de 27 en tiros libres. 35 rebotes (24 defensivos).
DRAC INCA (31+21+16+27): Marc Blanch (2), Gerard Brown (16), Antonio Reynolds (32), Jan-Henrik Jagla (15), Anthony Stacey (15) -cinco inicialSergio Rodríguez (0), Óscar Rodríguez (2), Juan Francisco Riera (0), Alberto Ruiz Galarreta (2) y Rogelio Legasa (11).
26 de 50 en tiros de dos, 8 de 15 en lanzamientos triples y 19 de 22 en tiros libres.
Àrbitros: Àngel de Lucas de Lucas y Fermín González Díaz. No hubo eliminados.
Cristóbal Muñoz |SAN SEBASTIÀN
El Drac Inca no pudo con el Bruesa GBC en su visita al polideportivo Josean Gasca en un partido que supuso el regreso a las pistas del pívot Rogelio Legasa. El conjunto vasco se mostró superior en el tramo final del tercer cuarto y contó con la aportación estelar de David Doblas, que se erigió en el verdugo del conjunto mallorquín, en el que volvió a sobresalir Antonio Reynolds con unos números que le perfilan como MVP de la undécima jornada en la Liga Española de Baloncesto (LEB).
El choque se le puso de cara a los de Es Raiguer en los primeros compases, ya que dos triples de Anthony Stacey le allanaron el camino. Los gualdinegros, que gozaron de una máxima de ocho puntos a falta de 5:50 para el final del primer cuarto, se encomendaron al buen trabajo de Reynolds en todos los aspectos del juego para consolidar su ventaja y cerrar el primer episodio con nueve puntos de renta.
El segundo cuarto no alteró la decoración más bien contribuyó a incrementar la ventaja de los visitantes, que mostraron un alto nivel de acierto en los lanzamientos desde prácticamente todas las posiciones. El Drac manejó el ritmo a su antojo hasta marcharse de 12, justo el momento en el que empezó la reacción de un Bruesa empeñado en devolver la igualdad al electrónico. La remontada local coincidió precisamente con una laguna de juego de los mallorquines, que tuvieron que marcharse al túnel de vestuario con tan sólo dos puntos como colchón.
Tras la reanudación, el equipo de Inca recordó al que se había visto en el primer cuarto y se empleó a fondo para sujetar a los hombres importantes del grupo que dirige Porfi Fisac. Los gualdinegros encontraron las vías de escape que mostraba el entramado defensivo dispuesto por los vascos y pisaron el acelerador para llegar a disfrutar de una ventaja de once puntos. Los minutos fueron transcurriendo hasta el ecuador del primer cuarto y el Drac sufrió lo que el argot ciclista se llama pájara. La escuadra visitante se vino abajo. El Bruesa impuso el poderío de Doblas en la pintura y consiguió un parcial de 15-1, que esclarece el paréntesis negativo en el que se instalaron los mallorquines.
Clave
Sin duda el golpe asestado por los vascos fue letal. Y es que el Drac pasó de mandar en el electrónico con un cómodo 56-67 a terminar 71-68. Todo quedó pendiente del cuarto final, pero con la sensación de que los de Fisac habían conseguido la fórmula para anotarse la victoria.
Los hombres de Es Raiguer se rehicieron de la bofetada y propiciaron muchas alternativas prácticamente hasta el final. Los locales instalaron una renta de cuatro puntos en pleno intercambio de canastas y supieron dosificar la presión ante las ofensivas visitantes por volver a colocarse por delante.
Antonio Reynolds se tiró el equipo a la espalda cuando todo parecía perdido y sus dos aciertos consecutivos desde más allá de la línea de 6,25 metros pusieron en jaque la hegemonía del Bruesa. El ala-pívot estadounidense dejó el marcador en 97-95, pero el siguiente ataque local resultó fundamental. El gualdinegro Sergio Rodríguez cometió una antideportiva que permitía a los de Fisac disponer de dos lanzamientos y de la posterior posesión.
Un robo o alguna acción afortunada hubiera permitido a los isleños disponer de un resquicio de esperanza, pero el ímpetu de Anthony Stacey acabó traduciéndose en otra antideportiva. Si las cosas eran difíciles antes, se convirtieron en imposibles en cuestión de décimas de segundo. Los locales sacaron a relucir su oficio y no desaprovecharon la oportunidad de alzarse con una victoria que relanza sus aspiraciones y le permite afrontar con más tranquilidad sus próximos compromisos.
Por parte del Drac Inca sobresalió la figura de Antonio Reynolds, que anotó 32 puntos y capturó un total de seis rebotes. Fue precisamente el rebote una de las claves que inclinó la balanza del lado de los locales, puesto que David Doblas se mostró intratable bajo los aros y ninguno de los hombres altos de los de Es Raiguer pudieron frenarle. Doblas logró 23 tantos y ocho rebotes de los 35 que capturaron los de Fisac, que lograron diez más que su rival y se mostraron especialmente superiores en el capítulo ofensivo, lo que propició que dispusiesen de segundas opciones para certificar su victoria.
La noticia positiva para la entidad que preside Joan Rubert es el regreso de Rogelio Legasa tras una larga lesión. El pívot disputó ocho minutos y cincuenta segundos en los que anotó once puntos y capturó tres rebotes. La vuelta del ex jugador del Bruesa GBC a la plantilla inquera permitirá a los suyos tener una mayor rotación interior en los encuentros venideros y una calidad de entrenamiento que elevará sin duda el nivel de un equipo que sigue codeándose con los mejores de la categoría.
El Drac Inca, que sumó así su tercera derrota en lo que va de temporada 2005-06, recibe la próxima semana en el Palau d'Esports al Alerta Cantabria en un choque que se presume comprometido, pero que permitirá poner a prueba el rendimiento de la escuadra mallorquina una vez que puede disponer de todos sus efectivos.
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