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Alejandro Campano es el único futbolista con contrato en el Real Mallorca que finaliza su compromiso con la SAD balear el próximo 30 de junio. El centrocampista sevillano puede negociar con cualquier equipo desde ayer, pero la entidad que preside Vicenç Grande se ha apresurado a mover ficha para tratar de prolongar la continuidad del capitán en el vestuario bermellón. Tal y como estipula la normativa de la FIFA, desde el pasado día 2 de enero todos los jugadores que terminan contrato al finalizar la presente temporada ya pueden negociar con cualquier club. El único futbolista de la plantilla mallorquinista que se encuentra en condiciones de entablar conversaciones para cambiar de aires con la carta de libertad es Alejandro Campano, que en breve se sentará junto a su representante Tente Sánchez para escuchar la propuesta del Real Mallorca.

En medio de la vorágine de incorporaciones del mes de enero, la entidad isleña no quiere perder de vista a sus principales activos. Por este motivo, el club bermellón ya se ha puesto en contacto con Alejandro Campano para llegar a un acuerdo de renovación por el que está predispuesto el capitán rojillo. Existe predospisoción por ambas partes, pero aún hace falta pasar de las palabras a los hechos para cuadrar los números y los objetivos. Con los clubes pendientes de cerrar algún refuerzo para fortalecer sus respectivas plantillas de cara a la segunda vuelta del campeonato, el Mallorca dispone de mayor margen de maniobra y todo apunta a que la vinculación de Campano con los bermellones se alargará atendiendo a la voluntad que tanto el futbolista como el club han demostrado en la fase todavía embrionaria del proceso de renovación.

Cabe resaltar que Alejandro Campano (Sevilla, 29-12-1978), además del capitán, es el jugador que más temporadas acumula vistiendo la elástica rojinegra, puesto que su estreno con el conjunto bermellón data de la temporada 2000-01, cuando dejó el Sevilla B para ingresar en la disciplina del filial mallorquinista. En su primer año en la Isla trabajó bajo las órdenes del actual técnico del Real Madrid, Juan Ramón López, que le considera uno de sus mejores amigos. Con López Caro disputó 36 partidos en Segunda B y anotó un total de ocho goles dando buena cuenta de su maestría en los lanzamientos a balón parado, un aspecto del juego que le ha permitido marcar en dos ocasiones frente al Real Madrid en el Santiago Bernabéu.