La décimo quinta edición de la Challenge Illes Balears-Volta a
Mallorca sube hoy el telón en el ya tradicional marco del Paseo
Marítimo de Palma, donde la flor y nata del pelotón internacional
disputará la primera victoria parcial de la temporada en una
llegada masiva que es sinónimo de espectáculo.
Los mejores velocistas tienen una cita ineludible en la meta
ubicada frente al Auditorium de Ciutat en un duelo de primeras
figuras que querrán iniciar el curso con buen pie. El jefe de filas
de Rabobank, Óscar Freire, que ganó en Palma en 2005, se presume
como la rueda a vigilar, aunque varios especialistas llegan más
entonados al arranque de curso debido a su planificación. El líder
del Quickstep Paolo Bettini o el del Liquigas Paolini son las
amenazas extranjeras en un ramillete de aspirantes que completan el
veterano Àngel Edo del Andalucía-Paul Versan y los corredores del
Illes Balears-Caisse d'Epargne Issac Gálvez y el debutante
Markov.
El recorrido de la primera etapa, que transcurre íntegramente
por la fachada marítima de la capital balear, ha visto ampliada su
distancia. El circuito urbano ha pasado de los 8,2 kilómetros de
ediciones anteriores a los diez de la presente, por lo que el
pelotón completará diez vueltas culminando los primeros cien
kilómetros de la ronda mallorquina.
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