Unicaja puede con los decibelios del Pavelló

LLANERA MENORCA (18+19+15+18): Krstic (14), Alberto Miguel (6), Stojic (18), Moss (11), Eley (6), -cinco inicial- Reynés (7), Stimac (0), Yáñez (5), Sabaté (0), Llorens (0) y Kornegay (3).

UNICAJA (19+12+19+24): Pepe Sánchez (9), Brown (20), Herrmann (21), Garbajosa (8), Santiago (0), -cinco inicial- Berni (6), Lázaro (0), Cabezas (3), Pietrus (0), Nicevic (0) y Risacher (7).

Àrbitros: De la Maza, Murgui y Pérez Niz. Eliminaron por cinco faltas personales a Reynés y Eley.

Xisco Cruz|MAÓ

Herrmann tuvo un inicio de vértigo y eso dio con un Unicaja acicalado en el arranque. El equipo de Scariolo asumió el gobierno del partido muy pronto, tratando de rajarlo cuanto antes y echarse a dormir, atendiendo a la importante cita del próximo martes ante Olympiakos. Herrmann disimulaba la poca aportación de los interiores de Unicaja, que andaban desaparecidos. Sin noticias de Eley ni de Moss, el Menorca se apoyó sobre la determinación de Stojic, que se fue hasta los 9 puntos en el primer parcial (18-19). Un parcial de 8-0 le permitió tomar distancias, porque Eley y Moss estaban de vuelta. Garbajosa andaba desafinado y Santiago buscaba aire desde el banquillo, por lo que los hombres altos del Menorca se forraron en el segundo cuarto. Eso, y la dirección de Reynés, dispararon a los baleares (26-19). El Unicaja se pasó más de cinco minutos sin anotar y eso cortocircuito sólo lo pudo reparar Risacher, que firmó cinco puntos consecutivos para cerrar la hemorragia (29-27). Pero el grupo de Segura circulaba a otra velocidad, con Moss muy intenso en ataque y con Krstic reclamando su porción de gloria. Un par de canastas del base croata y el músculo de Kornegay permitieron al Llanera volver a abrir margen al descanso (37-31). El Menorca vivió momentos de felicidad en la apertura del segundo tiempo, cuando abrazó la máxima diferencia (44-33). Un dos más uno de Stojic y una canasta de Krstic fracturaron a Unicaja. Justo hasta que irrumpió Brown. Un triple suyo y otro de Herrmann impulsaron a los de Scariolo, que cogieron carrerilla (49-44). El último cuarto se abrió con un triple de Yáñez, pero fue la última alegría. Los tiros libres y la puntería de Herrmann hicieron el resto (70-74).