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Tolo Jaume Los dos representantes mallorquines en la Superliga disputan hoy sus respectivos compromisos con el objetivo de alargar la buena trayectoria que han trazado en las últimas jornadas. El Drac Palma recibe en el Palma Arena al Elche (18:00) para consolidar el liderato alcanzado en la competición masculina, mientras que el Ícaro Palma visita tierras canarias para defender su recién adquirido tercer puesto de la Superliga femenina.

Los triunfos ante el Ciudad Medio Ambiente Soria y el Unicaja Almería han permitido al Drac Palma tomar la delantera en la competición doméstica después del paréntesis competitivo al que obligó la Copa del Mundo celebrada en Japón. Los mallorquines, que dieron un paso adelante en la Liga de Campeones al imponerse el miércoles a domicilio al HotVolleys Vienna, se verán las caras con el noveno clasificado y Marcelo Méndez podría optar por las rotaciones para dosificar los esfuerzos de sus hombres importantes, ya que el grueso de la plantilla arrastra muchas semanas plagadas de encuentros de la máxima exigencia.

El Club Voliebol Elche precisa un triunfo que le permita poner tierra de por medio respecto a la zona peligrosa de la tabla clasificatoria e intentará poner a prueba el nivel físico de los mallorquines, que afrontarán la próxima semana un nuevo partido correspondiente a la máxima competición continental para sellar su clasificación.

Por su parte, el Ícaro Palma busca su quinta victoria consecutiva ante el IBSA Club Voleibol en el pabellón Carlos García San Román de Las Palmas. El equipo de Ernesto Rodríguez, que ha accedido al tercer puesto de la tabla tras la última derrota del Hotel Cantur, quiere apuntalar la progresión exhibida en el juego y tratará de hacerlo sin Aurea Cruz, que ha sido convocada por la selección de Puerto Rico, pero con los primeros minutos de la última incorporación de las mallorquinas, la brasileña Bia.

El IBSA Club Voleibol es el colista de la Superliga femenina y no conoce la victoria, pero el técnico Ernesto Rodríguez advierte que «no podemos olvidar que jugamos en su pista y ante su afición. No podemos relajarnos y hemos de jugar con la máxima concentración».