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FERNANDO FERNÀNDEZ (PEKÍN) España y Estados Unidos ofrecen (8:30 hora española; 14:30 horas en Pekín) el mejor partido que el baloncesto mundial puede deparar, ubicado en formato de final olímpica y con más cosas de lo que parece en juego. Por un lado, el bautizado como 'Equipo de la Redención' quiere recuperar el cetro olímpico y devolver a la cuna de este deporte al Olimpo de la canasta. Por el otro, los campeones del mundo intentarán dinamitar todos los pronósticos, tomarse la venganza de la eliminación en cuartos de final en los Juegos de Atenas (94-102), y superar la mítica barrera de la plata que marcaron los héroes de Los Àngeles 84. Casi un cuarto de siglo después, los mismos países lucharán por el oro, poniendo sobre el parqué a dos de las mejores generaciones que recuerdan.

Por un lado, los 'Golden Boys' españoles quieren cerrar un bienio mágico con otro título. Campeones del mundo y subcampeones de Europa, la plata olímpica ya la tienen en el bolsillo, pero no se conforman. «Cuando tienes el oro a tiro, te motivas más si cabe», explicaba Marc Gasol, en referencia al segundo asalto entre españoles y estadounidenses en Pekín.

Y es que, en la primera fase, ambos equipos toparon con el primer puesto del grupo en juego. España estuvo lejos de su mejor nivel (119-82), pero hoy no serán el mismo equipo zarandeado por Kobe, LeBron y compañía. Han aprendido bien la lección y el técnico estadounidense, Mike Krzyzewski ha insistido en la fuerte defensa que imprime al partido la escuadra de Aíto. «Espero el espíritu ganador del partido ante Argentina, porque ellos nos van a plantear dificultades, en especial cuando vayan a defendernos en zona, como lo hacen todos», afirmó el máximo responsable del regreso de Estados Unidos a la cima del baloncesto olímpico ocho años después de Sydney.