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Después de 91 días de encierro en las cavernas, el Mallorca ha vuelto a ver el sol. Los de Gregorio Manzano no celebraban una victoria en el campeonato de Liga desde el 26 de octubre, pero aprovecharon al visita del Valencia para sacudirse el polvo de encima y acercarse a la superficie. Y de qué manera. Los bermellones minimizaron al pomposo conjunto de Unai Emery en un primer tiempo de fábula y aunque el calendario le tiene reservadas todavía varias trampas, la salvación vuelve a estar a tiro de piedra.

Le hacía falta al Mallorca una jornada de sosiego y la hizo coincidir con el despegue de la segunda vuelta. Aquel holgado triunfo ante el Espanyol (3-0) se había traspapelado entre una montaña de errores (tres empates y ocho derrotas) y la afición del ONO Estadi había empezado a alzar la voz en sus últimas citas con el equipo. Afortunadamente, la llegada de Mateu Alemany aplazó las manifestaciones de la hinchada, que ayer respondió de nuevo a las necesidades del grupo y le arropó como antaño. La plantilla lo agradeció y necesitó sólo un tiempo para barrer a su invitado y abrir los ojos antes de sumergirse en una semana trascendental para su futuro a medio plazo.

Más allá de la importancia que tendrán los puntos en la resurrección del Mallorca, la victoria permitió a Manzano actualizar el récord de victorias en Primera que poseía Llorenç Serra Ferrer. Se ha hecho esperar, pero con el de ayer el jienense contabiliza ya 53 triunfos de Liga sobre el banquillo bermellón, más que ningún otro entrenador.

Serra Ferrer, que sigue siendo el técnico que ha dirigido en más ocasiones al Mallorca sobre el ático del fútbol español (184), acumuló 52 victorias en su amplía hoja de servicios. El pobler logró las quince primeras en la temporada 86-87, a las que sumó otras siete un año después, once en la 89-90 y nueve en la 90-91. Antes de despidirse del club isleño, consiguió las diez últimas en el ejercicio 91-92 en un total de 183 encuentros al frente de los bermellones.

Manzano, que ha necesitado 149 actuaciones en el torneo para apropiarse de la marca, suma así otro récord a su historial como rojinegro. Es el entrenador que más victorias consecutivas ha logrado en Liga (siete), el que más triunfos locales ha encadenado (siete), el técnico de la mayor goleada de la historia en Primera (7-1 al Recreativo), el de la victoria más amplia como visitante (1-5 frente al Madrid), y el del Mallorca más goleador de la historia en la máxima categoría (69 goles la pasada campaña).