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C. Montes de Oca / F. Fernández El largo verano que se avecina en los despachos vive uno de sus primeros episodios a caballo entre Son Moix y Riazor. Y es que el Real Mallorca ha denunciado al Deportivo ante la Liga de Fútbol Profesional (LFP) por el impago de más de medio millón de euros correspondientes al traspaso de Albert Luque a la entidad coruñesa, cerrado en verano de 2002. El organismo rector del balompié profesional español ha dado validez a la demanda del club mallorquinista, lo que a su vez provoca que el conjunto presidido por Augusto César Lendoiro, al igual que el Mallorca con motivo del 'Caso Aduriz', no pueda fichar jugadores ni darles de alta ante la LFP, al menos hasta que no haya satisfecho las cantidades adeudadas al Mallorca.

La no satisfacción de los pagarés relativos a la operación ha sido reiterada a lo largo de las últimas campañas, una circunstancia que no pasa de largo ni para el Real Mallorca ni para la propia LFP, que ha tomado cartas en el asunto y ha bloqueado al Deportivo dentro del mercado estival.

El traspaso de Albert Luque se completó en el verano de 2002, a las pocas semanas de asumir el mando de la plantilla Gregorio Manzano (en su primera etapa en el banquillo de Son Moix), y se pactó por quince millones de euros, entrando además en la operación jugadores como 'Turu' Flores y Walter Pandiani, que reforzaron a un Mallorca que en la temporada 2002/03 alzaría la Copa del Rey en Elche.

La deuda del Deportivo con el Mallorca ha empezado a ascender hasta cantidades de relevancia, rebasándose los 500 mil euros, por lo que la entidad isleña no ha tenido otra salida que reclamar lo que le pertenece, en aras de obtener liquidez para poder maniobrar en una dinámica no muy alejada de la que envuelve a la SAD coruñesa.

Por otro lado, la publicación gallega 'Deporte Campeón' revelaba en su edición del viernes que el Deportivo está inhabilitado para inscribir a los nuevos futbolistas que pueda contratar. Así se lo ha comunicado al club coruñés la Liga de Fútbo Profesional, ante las denuncias por impago vertidas por parte varios ex futbolistas. Se habla de unas siete demandas, entre las que podría estar la del también ex mallorquinista Diego Tristán.