Formación del Constància, en Chamartín, luchando por el ascenso a Primera División en el año 1944. | ARCHIVO

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El Constància celebrará este domingo día 2 de diciembre el noventa aniversario de su fundación. Y lo hará en el Nou Camp de Inca con una Jornada de Puertas Abiertas. A las nueve de la mañana, los aficionados acudirán al recinto blanquinegro para dar comienzo a una larga serie de actos y reconocimientos.

El programa contará con la presentación de los equipos del fútbol base del Constància y el agradecimiento por el esfuerzo que cada uno de ellos realizan. Después de rendir homenaje a las categorías inferiores del club, tomarán la palabra las autoridades citadas, como Miquel Bestard, presidente de la Federació de Futbol de les Illes Balears y el presidente de la entidad inquera , Toni Ramis.

El momento estelar de la celebración se producirá cuando el club lleve a cabo un sentido homenaje a jugadores históricos que fueron piezas clave en la trayectoria de la entidad. Protagonistas de triunfos inolvidables que han quedado grabados en la retina y la memoria de todos sus seguidores, como Tomeu Salas o Rafael Nicolau, entre muchos. Acto seguido, a las 12, el equipo de Joan Esteva buscará una victoria clave en su singladura por la Segunda División B frente al Gimnàstic de Tarragona.

El club inquer rendirá así un merecido reconocimiento a una gran y larga historia desde su fundación, en 1922. Entonces, su primer partido lo disputó frente al equipo reserva del C.F. Inquense. Desde 1922 hasta 1933, el Constància jugó el llamado 'Campeonato Mallorquín', que ganó hasta en cuatro ocasiones (1933, 1934, 1935 y 1939). Más adelante, entre 1933 y 1936 se convirtió en el primer equipo balear en disputar la Copa de España, antigua denominación de la Copa del Rey, enfrentándose con equipos de la categoría del Fútbol Club Barcelona.

Su etapa de mayor esplendor se dio entre los años 1940 y 1945, cuando pasó cinco temporadas en la categoría plata, la Segunda División. Durante este periodo, el Constància llegó incluso a jugar en el campo del Real Madrid, en Chamartín (hoy Santiago Bernabéu) frente al Deportivo de la Coruña para para ascender a Primera División, uno de los grandes hitos del fútbol balear.