Eufemiano: «Soy el único que sabe si Marta Domínguez está en la Operación Puerto»

«Como se ha hablado del tema de Marta Domínguez, yo quiero decirle a Odriozola que como mejor estaría es calladito. El único que sabe si Marta Domínguez está realmente en la Operación Puerto o no soy yo, ni siquiera ella lo sabe, y evidentemente la única persona que lo va a saber si quiere es su señoría, que para eso le ofrecí la posibilidad. Lo demás son todo conjeturas. El único que lo sabe soy yo, decidiré cuándo lo hago público y se lo diré a su señoría», reiteró Fuentes a los periodistas tras la sesión del juicio oral celebrada este lunes.

«Pude haberla tratado»

Al médico se le preguntó entonces si Marta Domínguez es el nombre en clave 'Urco' que figuraba en su documentación. «Esa pregunta está contestada en la declaración que hice en la 'Operación Galgo' y me remito a ella», dijo. En aquel momento, el canario empleó su ambigüedad habitual para referirse a la palentina. «Pude haberla tratado, pero en ningún caso en los últimos cinco años», aseguró hace dos años.

Fuentes empleó a la atleta como punta de lanza de su ataque a José María Odriozola. «El no me echó, me fui yo. Puedo entender que a lo mejor pueda tener lapsus porque tiene una determinada edad. Mi compañero el doctor José Luis Merino, que es hematólogo, tiene 71 años y no está aquí -en el juicio de la Operación Puerto- porque tiene Alzheimer. Odriozola (73 años) es mayor que él, o sea que entiendo que pueda tener principios ... Todos, no nos escapamos nadie, no se trata de una cosa personal hacia él, pero es posible que tenga lapsus», declaró.

Fuentes recordó que fue contratado como jefe de los servicios médicos de la RFEA en 1983 y que impuso «limitaciones» a Odriozola -que no fue presidente hasta 1989- porque «se dedicó a publicar artículos sobre hematología y transfusiones» pese a que «es doctor en Química», por lo que «aparte de manejar probetas y dar clases, no puede saber mucho de hematología».

«Yo mismo, como médico, me considero personal sanitario que tiene cierta formación y alguna experiencia. Ha habido peritos aquí -en el juicio- que han reconocido no ser hematólogos, pero lo hematólogos como José Luis Merino tienen sobradamente más experiencia que un médico y, por supuesto, que un químico», subrayó.

Deja «las cosas claras» sobre su salida de la RFEA

Fuente expuso su versión de las razones por las que abandonó la RFEA en 1988. «Yo dimití en el 86 y el presidente que estaba, Juan Manuel de Hoz, me pidió a título personal y por escrito que siguiera siendo su asesor. Lo seguí siendo dos años más hasta el 88, cuando dije adiós porque querían implicar a mi mujer en un caso de dopaje», lanzó respecto a la ex atleta Cristina Pérez.

«Nunca ha aparecido en la orina de Cristina Pérez un anabolizante, ni siquiera cuando la envenenaron con una sustancia para adelgazar. Sigue siendo hoy en día igual de delgada que cuando hizo sus récords de España. Me fui porque vi que había cosas que no estaban bien y que no compartía. Mi mujer en un mes batió cuatro veces el récord de España -de 400 metros vallas- y en uno de ellos apareció una sustancia para adelgazar, un anorexiante llamado Clorfentermina que tomaban las personas gruesas para perder apetito. Ni hormona, ni anfetamina, anabolizante, ni nada», reivindicó.

Fuentes recordó que aquel control a su esposa se realizó «de forma irregular», ya que «no le dieron un bote sino una botella de Fontvella, que se la quedaron los médicos diciendo 'ya la sellaremos, hay confianza'».

«El procesamiento no fue el adecuado y anuló ese control. Si ella batió el récord de España dos veces más en cuestión de veinte días y dio dos veces negativo, está claro que esa sustancia no era la que necesitaba para hacer ese récord. Y lo batió un mes después en las Olimpiadas de Seúl en cuartos de final y semifinales. Sigue siendo el actual récord de España y ella pidió control para que le validaran su récord», reiteró.

Esta «animadversión» que advirtió hacia su persona fue lo que llevó a Fuentes a tomar la decisión de abandonar la Federación Española. «A finales del 88 acabó el mandato de Juan Manuel de Hoz, salió de presidente Odriozola y yo ya no estaba allí, ya me había ido. Dejemos las cosas claras. Al pan, pan, y al vino, vino. Si estamos a setas, a setas, y si estamos a Rolex, a Rolex», zanjó.