Imagen de Enric Mas durante la primera etapa de la Vuelta al Algarve. | @deceuninck_qst

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Enric Mas tiró de inteligencia, que unida a una pizca de fortuna, le ayudaron a evitar una caída múltiple que diseccionó en numerosas unidades en una movida primera etapa de la Vuelta al Algarve. El ciclista 'artanenc' del Deceunick-Quick Step logró salvar el percance y colocarse en el grupo de cabeza, superando con nota la jornada inicial. Una etapa de 199 kilómetros con salida en Portimao y meta en Lagos y en la que la victoria fue para uno de los compañeros del balear.

El holandés Fabio Jakobsen (Deceuninck-Quick Step) fue el más potente en el reducido esprint final, haciéndose con la victoria de etapa y el liderato en la clasificación general (4:52:59). Con el mismo tiempo que el ganaron entraron otros veinticinco corredores, entre ellos el mallorquín Enric Mas, en el puesto quince de la etapa y, en consecuencia, de la general, con el mismo tiempo que Jakobsen y segundo español en la provisional, por detrás de Jon Aberasturi (Caja Rural-Seguros RGA), octavo.

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Entre los integrantes del pelotón delantero se encontraba también David de la Cruz (Sky), que supo evitar el percance final de una movida etapa inicial de la Vuelta al Algarve.

En las carreteras portuguesas ha realizado un stage Enric Mas junto a su equipo, y ha elegido el Algarve como escenario de su puesta de largo ante una temporada 2019 en la que deberá refrendar las esperanzas generadas en torno a su figura tras acabar en segunda posición en La Vuelta.

El de Artà es uno de los favoritos para la general, y la baza del Deceuninck-Quick Step para el triunfo final en el Algarve, para el que, además de Enric Mas, se han posicionado tras la primera selección otros ilustres del pelotón, como el citado De la Cruz, Jasper De Buyst (Lotto-Soudal), Wout Poels (Sky), Rüdiger Selig (Bora-Hansgrohe) o Maarten Wynants (Team Jumbo-Visma).

Para este jueves está reservada una de las primeras jornadas llamadas a ser decisivas para el desenlace de la Vuelta al Algarve. La segunda etapa plantea el primer final montañoso, con meta en el Alto da Fóia, una ascensión definitiva de ocho kilómetros que pasará factura en la recta final de una jornada de 187'4 kilómetros de recorrido entre Almodovar y el citado Alto da Fóia.