Cairús, Dreyer y Bibiloni posan en el Palau d'Esports de Son Moix. | Urbia Voley Palma

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26 de febrero de 2017, un día que difícilmente podrán olvidar Marcos Dreyer y Renzo Cairús. Hace casi tres años, técnico y jugador se proclamaban campeones de la Copa del Rey de voleibol. Lo lograron bajo la denominación de Can Ventura Palma, el equipo impulsado por el recordado Damià Seguí. Aquel año, el conjunto mallorquín tuvo que recorrer un largo camino hasta llegar a conquistar el título.

Vencieron al Río Duero Soria en cuartos de final; después llegó la victoria frente al Unicaja Costa de Almería en semifinales y, finalmente, se impusieron al Club Voleibol Teruel (3-2) en una final tan intensa como emocionante. Los parciales de los 5 sets disputados no dejan lugar a dudas (19/25, 25/22, 25/19, 19/25 y 22/20). Fue un partido de infarto.

«Recuerdo que fue una final muy larga y muy dura con opciones para ambos conjuntos. Dicen que fue una de las mejores finales que se recuerdan. Fue una auténtica locura que acabó con victoria del Can Ventura. El voleibol mallorquín volvía a conquistar un título de la mano de Damià Seguí al que siempre estaremos muy agradecidos. Para mí fue una satisfacción personal enorme poder brindarle este título. Para nosotros es imposible olvidar la Copa del Rey que ganamos ese año en Leganés», recuerda el entrenador Marcos Dreyer.

Además del técnico hay otros 'supervivientes' de aquel exitoso y recordado Can Ventura que figuran en la actual plantilla del Urbia Palma. Es el caso del receptor Renzo Cairús, uno de los jugadores con más experiencia del vestuario. Él también ganó esa Copa del Rey. Junto a ellos, también estuvo Carlos Bibiloni, actual segundo entrenador del Urbia Palma y, desde hace ya algunos años, la mano derecha del técnico Marcos Dreyer.

Ahora, los tres sueñan con poder alzar de nuevo el título copero. El camino también se perfila complicado. El equipo mallorquín debutará frente al UBE L'Illa Grau en cuartos de final. En caso de victoria, luchará con el Club Voleibol Teruel por una plaza en la gran final. Complicado, pero no imposible. Esta vez, el Urbia Palma juega en casa. La Copa del Rey llega al Palau d'Esports de Son Moix.